Protestas en Cataluña contra la reforma de la ley del aborto

Barcelona, Sabadell y Tarragona concentraron los actos y manifestaciones contra la 'ley Gallardón'

Una activista coloca una soga al cuello de la estatua de un santo en una iglesia de Sabadell.CRISTÓBAL CASTRO

Cientos de personas participaron ayer en protestas y actos celebrados en Barcelona, Sabadell y Tarragona en contra de la reforma de la ley del aborto impulsada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón.

Según la Guardia Urbana, 200 personas se concentraron en la avenida de la Catedral de Barcelona para exigir que el aborto sea “libre y gratuito”. En Tarragona un centenar de personas se congregaron ante la subdelegación del Gobierno convocadas por el Comando Feminista. Su portavoz, Rocío León, señaló que es intolerable el retroceso al que se enfrentan las mujeres si se las “condena a abortar en la clandestinidad” y aseguró que la normativa actual “está a la altura de las leyes europeas y garantiza a profesionales y mujeres actuar dentro de la protección del marco legal”.

En otro escenario, la plaza de Creu Alta de Sabadell, 250 personas según fuentes policiales, y dos mil, según los organizadores, se manifestaron contra la reforma de ley Gallardón como parte de la campaña Vallès por el aborto libre impulsada por sindicatos y entidades de esta comarca. La protesta en Sabadell finalizó delante de la sede del PP.

En Sabadell, los Mossos tuvieron intervenir para identificar a una veintena de personas que supuestamente habían hecho pintadas y enganchado pegatinas en diversos puntos de la ciudad, entre ellos la sede del PP, donde apareció pintada en el suelo la frase: “No hemos llegado aquí para detenernos”. Los identificados declararon que los agentes les pidieron su documentación por los sucesos relacionados “con las pegatinas y graffitis”.

"Es una ley que recorta los derechos de la mujer, burocratiza el proceso y además introduce el aborto dentro del Código Penal", ha denunciado María Mena, miembro de Justa Revolta, uno de los colectivos convocantes.

La solución para las entidades proabortistas se encuentra en establecer una educación sexual universal. Además, consideran fundamental que todos los ciudadanos tengan acceso garantizado a los anticonceptivos y que se permita a las mujeres decidir sobre su futuro.

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