El Gobierno de Uribe propone a las FARC negociar a través de Internet

El Gobierno de Colombia ha excluido la posibilidad de celebrar encuentros directos con la guerrilla de las Fuerzas Armadas de Colombia (FARC) para la búsqueda de un acuerdo humanitario, que permita liberar a las personas secuestradas, y ha sugerido al grupo rebelde que utilice Internet como canal de comunicación entre las partes.

"Nosotros creemos que existe también un canal de comunicación que es muy rápido y nos permite avanzar con rapidez, que es la vía de Internet", ha señalado el alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo.

El consejero del presidente Álvaro Uribe ha agregado que "si se utiliza adecuadamente la vía Internet, también se puede avanzar muy rápidamente en lo que tiene que ver con el intercambio humanitario". "Pero siempre a partir de los criterios expuestos públicamente por el Gobierno", ha aclarado Restrepo.

En respuesta a la postura de la guerrilla, que ha afirmado que un acuerdo se hace "conversando cara a cara", Restrepo ha insistido en que tanto el grupo rebelde como el Gobierno pueden hacer uso de Internet, ha reseñado 'RCN'.

Por su parte, las FARC han afirmado en un comunicado, divulgado el pasado 20 de agosto, que Uribe ha tomado los medios de comunicación como vía para "enviar sus propuestas", con lo que, a su juicio, elude "el otorgamiento de garantías a los ya designados negociadores de la guerrilla".

Al respecto, según Restrepo, "estamos en pleno siglo XXI, hay que utilizar los nuevos recursos de la tecnología y las FARC tienen un acceso a Internet y por esa vía nosotros podemos adelantar las comunicaciones pertinentes".

Restrepo también ha recordado que es él la "única persona autorizada por el Gobierno, desde el 7 de agosto de 2002 (fecha en la que asumió Uribe) para acercamientos y negociaciones con los grupos armados ilegales".

La propuesta del Gobierno consiste en la liberación de los 60 civiles y efectivos de la fuerza pública que mantiene como rehenes, a cambio de la excarcelación de 50 insurgentes presos que sólo estén procesados o condenados por rebelión. Esta oferta oficial alcanza solamente a cerca del diez por ciento de los guerrilleros detenidos

que esa organización exige que sean sacados de prisión, para canjearlos por los secuestrados, entre ellos la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y tres estadounidenses.