Narbona presenta la alternativa al trasvase, basada en la desalación y reutilización

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, ha presentado hoy en el Congreso la alternativa que el nuevo Gobierno ha preparado al trasvase del Ebro en el que se basaba el Plan Hidrológico Nacional aprobado por el anterior Gabinete. Según ha anunciado, el nuevo plan, basado fundamentalmente en una mejor gestión de los recursos, en la desalación y en la reutilización de las aguas, permitirá aportar 1.058 hectómetros cúbicos anuales a las comunidades afectadas y conllevará una inversión total de 3.747 millones de euros en actuaciones urgentes para Murcia, Valencia, Cataluña y Andalucía.

La titular de Medio Ambiente ha destacado que el nuevo proyecto ya se encuentra en manos de las comunidades autónomas y que antes de su aprobación por parte del Consejo de Ministros, en un plazo de tres o cuatro semanas, pasará por el Consejo Asesor de Medio Ambiente y el Consejo Nacional del Agua.

La ministra ha destacado que esta alternativa ofrece "más agua, a un menor coste y en menor tiempo" que el trasvase planteado por el anterior Gobierno, que era inviable económica y ambientalmente y por este motivo planteaba tantas dudas a la Comisión Europea. Además, ha pedido a los presidentes de Valencia y Murcia, que han rechazado el plan en sus entrevistas con Narbona, que "dejen de engañar a los agricultores, abandonen la demagogia y cambien de actitud". Además, confía en que las futuras entrevistas de ambos responsables autonómicos con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, constituyan una ocasión para el diálogo y el entendimiento.

Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Cataluña recibirán en conjunto 1.172 millones de euros, la tercera parte de lo previsto en el trasvase. No obstante, se destinarán 2.575 millones de euros en actuaciones para la mejora de la gestión y de la calidad del agua.

Desalación y reutilización

La ministra detalló el conjunto de actuaciones contempladas en la propuesta del Gobierno, que ofrece un total de 1.058 hectómetros cúbicos anuales, frente a los 1.050 previsto en el trasvase del Ebro, de los cuales 312 irán destinados a la cuenca del Sur, 336 para el Segura, 265 para la del Júcar y 145 hectómetros cúbicos para las cuencas internas de Cataluña. De los 1.058 hectómetros, un total de 250 se obtendrán de medidas de ahorro y mejora de la gestión, otros 187 de reutilización y 621 de desalación. Según el plan, el agua que llegue a las zonas receptoras tendrá un precio de 90 céntimos el metro cubico, más barato que el previsto en el trasvase del anterior Gobierno.

Respecto a las inversiones en actuaciones urgentes, la alternativa prevé destinar un total de 3.747 millones de euros, de los que 1.262 son para Valencia, 1.110 millones para Cataluña, 807 para Murcia y 568 para Andalucía.

La ministra ha anunciado que entregará mañana su proyecto al responsable de la Comisión de Fondos Regionales de la UE para que lo estudie Bruselas. En este sentido, ha explicado que España pedirá financiación por valor de algo más de 1.200 millones de euros para estas actuaciones. Asimismo, ha adelantado que el Gobierno se da un plazo de un año para poner en marcha centros de intercambio y bancos públicos del agua y no se descarta "radical y profundamente" un trasvase de aguas de otras cuencas.