De Karl Lagerfeld a Paris Hilton: cómo el estilo de dos iconos pop tan diferentes marcó a una generación (y sigue dictando tendencia)
Protagonizada por la empresaria y musa Y2K, ‘From Paris with Love’ es la nueva campaña de la Maison francesa, una celebración de la autenticidad y el espíritu irreverente de su fundador

Uno de los recuerdos que Paris Hilton atesora de Karl Lagerfeld es su devoción por The Simple Life. Según recordaba en una entrevista en W Magazine, el genio alemán le confesó que también había caído rendido ante ese hipnótico programa —precursor del fenómeno de los reality shows y, en cierto modo, de la cultura celebrity actual—, que seguía las desventuras de dos niñas ricas que debían aprender lo que es tener que trabajar para vivir. Con su carisma y espontaneidad, Hilton y su amiga Nicole Richie lograron conectar con el lado más humano del público y su sentido del ridículo. Lo hicieron de forma tan genuina que, casi sin proponérselo, alcanzaron la categoría de icono, revolucionando la cultura pop y el estilo de los 2000.
Tampoco sorprende que el genio alemán se fijara en ella. Defensor de que la moda debía “vestir la actualidad”, el diseñador tenía un talento excepcional para anticiparse a los cambios culturales y capturar el pulso de cada generación. Una visión que perdura en el ADN de la firma homónima que fundó a mediados de los ochenta. “Karl y ella han definido épocas a su propia manera. Esta colaboración capta una energía inesperada y totalmente auténtica: un diálogo entre la influencia imperturbable y la relevancia en constante evolución”, apunta Pier Paolo Righi, CEO de KARL LAGERFELD, a raíz de su nueva campaña; toda una celebración de la autenticidad y el derecho a reinventarse.

Los dos comprendieron el poder cultural de la imagen en el nuevo milenio y construyeron un personaje tan reconocible como difícil de descifrar. Hilton le dio la vuelta al estereotipo de “rubia tonta”, apropiándose del rosa, lo kitsch y la ingenuidad, para hacer de sí misma una marca de éxito; mientras que Lagerfeld exploró la elegancia atemporal del binomio blanco y negro, convirtiéndolo en sinónimo tanto de sofisticación como de irreverencia. “Karl era verdaderamente original: audaz, icónico y siempre adelantado a su tiempo. Siempre he admirado su espíritu inconformista”, subraya Hilton que, frente a la cámara del fotógrafo Chris Colls, canaliza ese espíritu irreverente y adelantado que definió a ambos.
Porque From Paris with Love establece un diálogo entre la musa Y2K y las raíces parisinas de la Maison que han logrado trascender generaciones. La sastrería protagoniza la propuesta, actualizando el uniforme icónico de Lagerfeld, a base de patrones estructurados, siluetas direccionales y sus accesorios imprescindibles: los trajes coquetean con los tejidos urbanos; las camisas, sin renunciar a los cuellos almidonados y las corbatas contundentes, juegan con la sensualidad de los cortes, mientras los mitones vuelven con fuerza para revelar su lado más glam y festivo.

El resultado es un armario atemporal y expresivo que perpetúa el legado inconfundible de Karl Lagerfeld. En todos los sentidos. La Maison ha recuperado de los archivos el K/ Autograph, un motivo inspirado en las primeras iniciales dibujadas a mano por el Káiser que debutó como logo en los ochenta. Con esa misma caligrafía segura y desenfadada con la que el creativo solía firmar sus bocetos, alternando entre la inicial y su firma completa, KARL LAGERFELD sella su pacto con el futuro.
Las autorreferencias tampoco terminan ahí. La campaña cobrará vida en distintos formatos, como una reinterpretación de Karl Interviews Karl —un metavídeo en el que el diseñador se entrevistaba a sí mismo—, lleno de humor y sorpresas que podremos disfrutar por redes sociales. Y culminará durante la Semana de la Moda de París el 1 de octubre, en una noche especial con Paris como protagonista, como no podía ser de otra manera.
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