‘Nada de blanco total, fuera el romanticismo’: cómo llevar la falda ‘boho’ este verano 2025
Prenda inamovible de la maleta de vacaciones, se adhiere ahora al asfalto con nuevas formas de combinarla. Prendas que rompan la obviedad y la puesta en valor de los accesorios forman parte de su éxito regreso
El boho chic, esa estética ‘celebrity’ y relajada que definió el comienzo de los 2000 en nuestros armarios, persiste en su idea de conquistar este verano. El empeño por su regreso que lidera la diseñadora Chemena Kamali, al frente de Chloé, no conoce límites, con el apoyo de una industria que se hace eco de cada uno de sus códigos de vestimenta para perpetuar su estilo etéreo y effortless entre las tiernas generaciones.
Tras imponerse el ante como segunda piel de esta primavera y los vestidos vaporosos en la maleta de vacaciones, hay una prenda con pasado hippie que siempre ronda los meses de estío: la falda boho. Capaz de poner de acuerdo a públicos tan dispares como la bohemia ibicenca, al paseo marítimo de Puerto Sherry o las ‘it girls’ londinenses, se asienta esta temporada para facilitar ese complejo ejercicio de vestir bien cuando el calor aprieta.
Incluso la estética Indie Sleaze que instauró la red social Fotolog y regresó hace un par de años de la mano de Celine, rinde pleitesía a su silueta aparentemente frágil en festivales de música. Un rápido vistazo a la colección que Kate Moss y Bobbie Gillespie (Primal Scream) han planeado junto a Zara para este verano con el perfecto ideario de cómo vestir sobre el lodo del Festival de Glastonbury, incluye esta falda etérea combinada con un bikini de tachuelas y botas de cowboy en su equipaje.
Diseños virales como la falda Lizi de la firma británica Allsaints, con encaje e infinidad de volantes, asientan un fenómeno que también avala la pasarela. Defendida en la pasarela PV25 de Chanel con una versión lujosa de la vestimenta zíngara, desestructurada en delicadas perforaciones por Ann Demeulemeester o casi rozando el terreno nupcial en la colección resort de Alberta Ferretti, es esa prenda fácil que aspira a contentar a todo los públicos pero que acorta su manera de abordarla.
Si la actriz y musa del boho chic Sienna Miller, acogió de buen agrado su silueta este verano como símbolo del haute hippie summer que ella misma inventó hace décadas con cinturones articulados de tachuelas y crop tops de encaje, Rosalía incide en su pátina mediterránea vestida de blanco de pies a cabeza. Dos maneras de llevar la prenda que genera opiniones muy diversas a su paso. “Este look del verano puede ser un error si caemos en lo literal. Pierde todo el sentido y llega a rozar el disfraz”, explica Iria Domínguez a S Moda.
La directora de comunicación y experta en teorizar las tendencias virales del momento, tiene claro que abrazar esta prenda en 2025 solo tiene sentido si rompemos con la literalidad. “Hay que descontextualizarla con otras prendas que no tengan nada que ver. Si nos vestimos de blanco total o abusamos del romanticismo podemos caer en un look de payesa poco favorecedor”.
Camisetas oversize o americanas para descontextualizar la tendencia
El gran secreto de las estilistas a la hora de crear un vestuario contemporáneo reside en saber mezclar prendas antagónicas que equilibran el conjunto. Un arte aplicado también a la falda boho. “Las expertas en street style evitan la obviedad [en este caso] del estilo mediterráneo, añadiendo prendas menos literales como una camiseta oversize, un body de lycra negro o una camisa masculina”.
Crear diversas alturas entre maxifaldas, bras y crop tops es otra manera de actualizar la prendas sin perder feminidad. Si Chloé apuesta por los sujetadores con delicadas puntillas combinados con faldas y calzones, Ludovic de Saint Sernin lo lleva al minimalismo más seductor, mientras Andreea Badala y su firma MurMur inyecta un toque cortesano con el azul empolvado de los corsés. “Mejor evitar el blanco total. Hay que modernizarlo con color”, apunta Domínguez.
Un body negro –bien con escote asimétrico o a ras de la cintura– elevará la prenda en un look nocturno, mientras que una americana oversize prolongará su uso a la vuelta de vacaciones o para una boda de otoño, creando ese efecto de ‘chaqueta prestada’ que proponen Chanel y Alberta Ferretti en sus colecciones.
La fórmula que Khaite instaura para el resort 25 marcará los meses de entretiempo: una chaqueta tipo biker, desgastada y con dos tallas de más junto a una falda vaporosa de flores.
La puesta en valor de los accesorios determina el éxito de cualquier estilismo. Por ello, a la hora de defender la falda boho este verano, toca sumarse a la fiebre por los cinturones, ya sea en formato joya con piedras y perlas, hiperfinos de eslabones o al estilo folk de correas articuladas.
Los pañuelos anudados a su cintura o un calzado inesperado, como los mocasines de colores o botas moteras, elevarán la manera de llevar esta falda en cualquier época del año.
1. Loewe
2. Isabel Marant
3. Ba&sh
4. Pull&Bear
5. Toteme
6. Bimba Y Lola
7. Allsaints
8. Chloé
9. Maje
10. Tintoretto
11. MC2 Saint Barth
12. IKKS
13. Mango
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