Junts per Catalunya insiste: “Estamos a tiempo para investir a Jordi Sànchez”

El grupo parlamentario de Junts per Catalunya, reunido en Bruselas, decidió ayer no pasar aún la página de Jordi Sànchez, en prisión preventiva, e insistió en presentarlo como candidato a presidir la Generalitat. Todo ello, pese al largo e incierto recorrido judicial al que tendría que enfrentarse para reivindicar lo que él considera su derecho. “Estamos en tiempo y forma para garantizar su investidura”, afirmó Eduard Pujol, portavoz adjunto de la lista liderada por Carles Puigdemont. Esta decisión obliga a aparcar, de momento, el plan c que tienen los independentistas ante las investiduras fallidas del expresident y de Sànchez: el exportavoz del Govern Jordi Turull.

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Pujol negó que el giro en los planes del grupo busque aumentar la tensión con el Gobierno. “No es una estrategia para poner al Estado contra la pared. Ya lo ha hecho solo”, aseguró. Se impone así en Junts per Catalunya la tesis de una parte del grupo que defiende que desistir del nombre de Sànchez implica adoptar “el marco mental del Gobierno”. “Sería injusto para nuestro candidato y nuestros electores”, agregó el portavoz del grupo.

El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena negó el permiso a Sànchez para acudir a su debate de investidura el pasado lunes, argumentando riesgo de reincidir en un supuesto delito de rebelión. El exlíder de la Asamblea Nacional Catalana está en prisión preventiva desde hace 149 días. La defensa insiste en que se están violando los derechos políticos de Sànchez y por ello ha apelado ante el Supremo —que no tiene un plazo establecido para pronunciarse—. Sànchez también tiene previsto presentar un recurso de amparo ante el Constitucional y finalmente acudirá al Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Desde Junts per Catalunya no especifícan cuánto durará ese recorrido judicial.

La reunión de 29 de los diputados de la lista del expresident se celebró en la sala Alfred Hitchcock del hotel Marivaux, un antiguo cine situado en el centro de Bruselas. En las más de seis horas de reunión, los parlamentarios también abordaron la posibilidad de un adelanto electoral. “No es el escenario sobre el que trabajamos”, recalcó Pujol.

ERC instó el pasado martes a Junts per Catalunya a que propusiera un candidato viable. El nombre de Turull, que podría ser inhabilitado por su participación en la organización del referéndum ilegal, estaba bien visto por los republicanos. Sin embargo, la negativa de la CUP a apoyar una nueva investidura ha llevado a los diputados más radicalmente independentistas a cuestionar ese nombre y proponer otro para lograr el apoyo de los anticapitalistas. La CUP, sin embargo, recuerda que su desacuerdo no radica en el nombre, sino en que la propuesta de gobierno pactada es muy “autonomista”. Pujol aseguró ayer: “Tendremos Gobierno y garantizaremos la república”.