“El que pueda teletrabajar, que teletrabaje. Va a ser caótico”: Sevilla corta 300 calles ante la cumbre de la ONU

Sevilla se prepara para la IVª Conferencia Internacional sobre Financiación al Desarrollo de Naciones Unidas con un importante despliegue policial: 7.700 agentes garantizarán la seguridad de una cumbre a la que asistirán entre 9.000 y 12.000 personas de las delegaciones oficiales de los 150 países que han confirmado su presencia, entre los que se cuentan 50 jefes de Estado o de gobierno y representantes de otros tantos organismos internacionales. Sin embargo, todo este operativo ha sumido en la incertidumbre a los sevillanos, en especial a los vecinos del barrio de Sevilla Este —donde se encuentra FIBES, el Palacio de Exposiciones y Congresos que albergará la cumbre—. No saben cómo podrán acudir a sus puestos de trabajo a lo largo de la semana que viene, debido a los cortes de avenidas y calles —más de 300— y al cambio en las paradas y recorridos de los autobuses. El propio alcalde de la ciudad, el popular José Luis Sanz, ya reconoció que los sevillanos iban a sufrir los problemas de movilidad: “El que pueda teletrabajar, que teletrabaje. Quien pueda pedir día de asuntos propios, que los pida. Va a ser caótico todo”, advirtió a principios del mes de junio.

“El problema es que nosotras no podemos teletrabajar y estamos muy preocupadas por cómo llegar el lunes hasta aquí”, explica Eva —que prefiere no dar su apellido—, que es asistenta de ayuda a domicilio. Ella tiene coche, pero estos días ya está sufriendo los desvíos motivados por los controles policiales. Su compañera viene en autobús y no sabe muy bien todavía los cambios en las paradas y las frecuencias. Sus problemas son los mismos que tienen María del Mar Puerta, que regenta una farmacia a una manzana de FIBES, y sus compañeras de botica. “Aquí no hemos recibido información por parte del Ayuntamiento sobre cortes de carreteras, qué accesos podremos utilizar, dónde vamos a poder aparcar… En la covid estuvimos abiertos por servicio público y ahora nos dejas desamparados por una cumbre”, se lamenta.

El Ayuntamiento ha diseñado un plan de movilidad especial para la cumbre que se desplegará entre el domingo 29 de junio y el jueves 3 de julio. La conferencia como tal se inaugura el 30 de junio, pero la víspera hay una recepción oficial a los jefes de Estado de y de Gobierno ofrecida por el rey Felipe VI en el Alcázar, que también afectará a la circulación y a la vida del centro de la ciudad. La parte más afectada, sin embargo, es la de Sevilla Este, un barrio de 100.000 habitantes que adolece de buenas conexiones con el centro histórico, hasta el punto de que los sevillanos se refieren a él como Córdoba Sur por lo mucho que se tarda en llegar hasta allí.

Las vías principales que rodean FIBES permanecerán cerradas al tráfico entre las 6.30 y las 19 del lunes y de las 8 a las 19 del 1 al 3 de julio. Las líneas de autobuses que parten y salen de esta zona de la ciudad serán gratuitas esos días, pero aun así, desde el consistorio se reconoce que habrá problemas. “La celebración de esta cumbre comporta, por otro lado, un complejo reto organizativo que provocará inevitablemente una afectación considerable en la vida cotidiana de los ciudadanos. Como alcalde de Sevilla pido disculpas de antemano por las molestias que un evento de estas características conlleva”, indica el regidor en un bando municipal que ha emitido el consistorio con motivo del encuentro.

Cierre de veladores en el centro

Los problemas de movilidad también se van a trasladar al centro de Sevilla donde las distintas recepciones en lugares emblemáticos de la ciudad van a obligar también no solo al corte de las calles adyacentes, sino al cierre de los veladores de los locales de hostelería aledaños, que se encuentran en las zonas más concurridas de Sevilla como el entorno de las Setas o la Catedral a lo largo del fin de semana, cuando más clientes suelen recibir. En concreto, están previstas la recepción del Rey en el Alcázar este domingo; el lunes, la que ofrece el presidente del Gobierno en el palacio de Dueñas, y otras que organizan otras delegaciones en enclaves como en el Archivo de Indias.

La decisión del cierre de los veladores fue comunicada a los hosteleros este mismo jueves. “No nos han dejado margen de maniobra”, lamenta un portavoz de la Asociación de Hosteleros de Sevilla, que recalca cómo esta decisión, conocida a última hora, no les va a permitir cancelar las provisiones de bebida y comida, que siempre se incrementan los viernes y los sábados, ni advertir al personal de que no acuda a trabajar. “Sin contar con las cancelaciones”, añade.

En los bares y restaurantes que se encuentran frente a FIBES de lo único que se habla en vísperas del arranque de la cumbre es de cómo van a llegar a trabajar y de cómo va a afectar a las comidas y cenas que ofrecen habitualmente. “Aquí la mayoría de nuestros clientes son trabajadores de la zona, si no pueden venir o teletrabajan, pues nos afectará”, indica Antonio Martínez, encargado de Casa Antonio Moreno. Otro inconveniente de la conferencia de la ONU es que, por motivos de seguridad, se han eliminado los contenedores de la zona. “Tenemos que ir cargados con la basura bastantes calles. Esto nunca nos había pasado hasta ahora”, señala.

Para garantizar la seguridad de la cumbre, el Ministerio del Interior ha movilizado a 7.722 agentes —5.903 policías nacionales y 1.819 guardias civiles— en un dispositivo que se activó a finales de febrero, según informó el delegado del Gobierno, Pedro Fernández. A estos efectivos se les suman 500 miembros de las Fuerzas Armadas y alrededor de 200 policías locales. Para garantizar su presencia, el Ayuntamiento propuso un plan de productividad, cuestionado por los sindicatos, que consideran que esa no es la forma adecuada para movilizar a una plantilla escasa de personal y a la que aún se le deben horas extra de la Semana Santa.

“Este es el evento más importante que ha acogido Sevilla desde la Expo 92. Entonces también acudieron muchos jefes de Estado y de Gobierno, pero fue a lo largo de varios meses, esto es todo en cuatro días”, indica una fuente municipal. “Es complicadísimo coordinar las comitivas de 50 mandatarios que salen de sus hoteles y van al Alcázar, y luego vuelven y van a FIBES y después a Dueñas. Esto evidentemente tiene que afectar a los sevillanos, pero pedimos paciencia, la ocasión lo merece”, añaden. La ciudad, recuerdan estas fuentes, está acostumbrada a organizar eventos de gran envergadura.