Biberones y botellones

Parece que la adrenalina y las hormonas están reñidas con la responsabilidad, el respeto y el miedo a una pandemia que ya se ha llevado por delante a un elevado número de mayores y otros que no lo eran tanto. Las recomendaciones sanitarias insisten en guardar las distancias y hacer uso de mascarillas y alcoholes para frenar al virus y prevenir los contagios, pero algunos se decantan por la opción incorrecta, quizá pensando que su ingesta clandestina ejercerá como una buena purga. Las fiestas —en su mayoría ilegales o clandestinas— se suceden una tras otra haciendo caso omiso a una situación límite. La adolescencia siempre ha sido una etapa delicada, llena de incongruencias y desafíos varios, pero no es lógico lo que está ocurriendo.

Miguel Ángel Baixauli Moreno. Picanya (Valencia)