El caso de Abelito en ‘La Casa de los Famosos’ evidencia la falta de inclusión hacia las personas de talla baja
El concursante del ‘reality’ mexicano ha tenido que improvisar para adaptarse, puesto que las instalaciones del programa no contemplan sus necesidades


La Casa de los Famosos ha incluido en su nueva temporada entre sus participantes a Abel Abelito Sáenz, un influencer de talla baja que en un par de semanas ha logrado convertirse en uno de los favoritos del público por su divertida personalidad. Sin embargo, con el estreno del programa se ha hecho evidente que la producción no estaba completamente preparada para hacerlo sentir incluido.
El reality show de Televisa reúne a celebridades bajo el mismo techo y las aísla del mundo exterior para grabar su comportamiento las 24 horas del día, los siete días de la semana, lo que ha puesto en evidencia la poca accesibilidad que tienen sus instalaciones para alguien como él. Si bien una de las cámaras de la sala principal se ha puesto a la altura de Abelito para que la audiencia pueda seguir sus actividades en la transmisión en vivo, hay momentos en los que no es visible en el resto de las habitaciones porque por su estatura —de 1,14 metros— queda por debajo de ciertos muebles, lejos del rango del resto del equipo audiovisual.
Otra problemática es que únicamente se le ha proporcionado un banco para que pueda alcanzar las repisas, los lavabos, la cocina, el baño y la cama, por lo que lo tiene que cargar a todos lados para poder tener autonomía dentro de la casa. En un par de ocasiones, sus compañeros lo llegaron a utilizar como asiento improvisado, y hasta se llegó a quebrar por darle el uso equivocado, lo que les valió una llamada de atención por parte de “la Jefa”, una figura similar al Gran Hermano que puede interactuar con los participantes. Aunque la intención de generar visibilidad e inclusión está presente, las fallas comienzan a evidenciarse y, hace días, Abelito no pudo participar en una dinámica grupal porque no había bicicletas adecuadas para su estatura.
Los seguidores del influencer de 25 años originario de Zacatecas saben que en su hogar el panorama es completamente diferente. En su canal de YouTube, donde ha amasado una comunidad de 340.000 seguidores, el joven ha compartido cómo era su vida cuando vivía en casa de sus padres —que también son personas de talla baja— por lo que todos los muebles, acabados y electrodomésticos están hechos a la medida para su comodidad. Sin embargo, desde hace tiempo radica en Ciudad de México, donde el espacio se ha adaptado para que tanto él como su pareja, una chica que conoció mientras ambos estudiaban la universidad, estén cómodos.
Días antes del inicio del concurso, el joven ya había anticipado en una entrevista con Marie Claire Harp, una de las conductoras del programa, que adaptarse a vivir en una casa que no era la suya sería un reto, lo que le ha valido críticas a Televisa porque, incluso con estas declaraciones públicas, no se tomaron medidas concretas para garantizar su inclusión desde el primer día. “El mundo está adaptado para lo que llaman gente ‘promedio’, para la gente ‘normal’, todo está adaptado a ellos. Entonces imagínense cuando una persona como yo se sube al metro, desde ahí toca adaptarse a un mundo que no está hecho para ti”, dijo en ese momento. Así, el caso de Abelito en La Casa de los Famosos pone sobre la mesa los vacíos que aún existen en materia de accesibilidad. Si bien su participación en el fenómeno televisivo representa un avance en términos de visibilidad, la verdadera inclusión exige acciones concretas para garantizar condiciones equitativas.
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