Un solar, un sobreviviente y un camino de 12 kilómetros hacia la muerte: los últimos pasos de Grupo Fugitivo

Carlos llegó tarde y eso le salvó la vida. Debía encontrarse el domingo 25 de mayo por la noche con el resto de los integrantes de Grupo Fugitivo para una presentación en la colonia Riberas del Río. Sin embargo, según le ha contado a medios locales Rubén Isaac, familiar de uno de los integrantes asesinados, cuando este llegó solo había un sitio vacío. No pudo contactar con ellos, por lo que optó por regresar a su domicilio. Desde esa colonia de Reynosa, donde fueron vistos por última vez, al basurero clandestino donde se encontraron los cadáveres, apenas hay 12 kilómetros. Un recorrido corto pero todavía plagado de incógnitas.

El caso ha sacudido la ciudad fronteriza de Tamaulipas. Las primeras líneas de investigación apuntan a una célula del Cartel del Golfo, conocidos como Los Metro, de los que hay 9 detenidos. Carlos, el segundo cantante que ha sobrevivido por llegar tarde, no ha dado muchas más señales. No se sabe si permanece bajo cuidado de las autoridades. Personas allegadas al cantante le han dicho a la prensa que “permanece a salvo”. Aunque la Fiscalía aún no ha confirmado los motivos del asesinato de los integrantes de la banda, colectivos de búsqueda y fuentes en Reynosa creen que los músicos “fueron citados premeditadamente”.

De acuerdo con la versión de familiares, la agrupación tenía una presentación en las inmediaciones de la colonia Riberas de Rancho Grande, al norte de la ciudad. Fue en esa área donde se presentaron en el Bar La Chinita. Las autoridades han encontrado rastros de sangre al interior del recinto, donde las fuerzas de seguridad realizaron un cateo y encontraron estas muestras para ser analizadas, según informó la exesposa de uno de los integrantes.

Posteriormente, según la Fiscalía de Tamaulipas, fueron secuestrados alrededor de las 22.00 del domingo, cuando se trasladaban a bordo de una camioneta negra a un evento privado en la colonia Riberas del Río, un área cercana al cruce del puente internacional Reynosa-Hidalgo, del lado mexicano de la frontera entre Tamaulipas y Texas. “Fueron citados a tocar en una palapa, pero solo había un solar baldío”, relató un familiar a la prensa local.

Fue en esa zona donde se registraron las últimas imágenes que se tienen del Grupo Fugitivo ese domingo por la noche. En un video compartido a través de su cuenta oficial en Facebook, Vázquez, el otro vocalista de la banda, entonaba la canción Cruzando el puente, de Los Cadetes de Linares, acompañado de otros tres compañeros, Nemesio Durán; Víctor Garza; José Francisco Morales; y Livan Solís de la Rosa, quien fungía como representante de la banda. En otra publicación de ese día se los puede ver en el mismo sitio en una serie de fotos acompañadas del siguiente texto: “Nos vemos en un rato más en McAllen, Texas. Puro Fugitivo, cruzando fronteras (No se crean, nada más la foto en el lado mexicano, pero esperemos un día poder extendernos a los Estados Unidos) [sic]”.

Los días pasaron y no fue hasta el martes 27 de mayo que la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas, en Tamaulipas, emitió fichas para localizar a los cinco hombres. Al día siguiente, el miércoles, fue hallada la camioneta en la que viajaban, en la colonia La Cañada, a poco más de seis kilómetros de donde fueron vistos por última vez, con “muestras de vandalismo” que intentaron borrar las calcomanías que identificaban al grupo. Mientras que el vehículo que transportaba sus instrumentos y equipos fue hallado en inmediaciones del puente internacional Pharr-Reynosa, otro cruce fronterizo hacia Estados Unidos.

Según la Fiscalía, la banda fue llevada a la colonia Aquiles Serdán donde, según ha detallado este jueves Barrios Mojica, “existen elementos que permiten presumir que es el lugar donde desafortunadamente fueron privados de la vida”. El predio donde se realizan las investigaciones forenses, según ha detallado la prensa local, es “una brecha, un exbasurero clandestino retirado del área metropolitana”, donde terminó el camino para el Grupo Fugitivo.

Hasta este miércoles, familiares, amigos y colegas de la banda mantuvieron las esperanzas de poder hallar con vida a los cuatro miembros y al representante de la agrupación. Mientras, unos protestaron dos días con un bloqueo de vías cerrando el acceso al puente internacional Pharr-Reynosa; otros colocaron velas con las imágenes frente a la Concatedral de Guadalupe, en el centro de la ciudad. No faltó incluso alguna canción, a ritmo de banda, anhelando que el peor de los presagios no se cumpliera: “Hoy Reynosa está triste por los muchachos del Grupo Fugitivo, ya que no aparecen. Hoy Reynosa llora y le pide a Dios que estos muchachos con vida a casa puedan regresar”.

Desde la noche de este miércoles, medios locales informaron sobre el hallazgo de cinco cuerpos calcinados en el predio de Aquiles Serdán. Sin embargo, la información no fue confirmada hasta la mañana de este jueves por la Vocería de Seguridad de Tamaulipas. Barrios Mojica no dio detalles sobre la identidad de los cinco cuerpos y ha afirmado que la investigación forense continúa.

Mientras el Fiscal de Tamaulipas daba su conferencia de prensa sobre los hallazgos del caso en Ciudad Victoria, capital del estado, los familiares de los integrantes protestaban a las afueras de esa dependencia en Reynosa. Están convencidos de que aún pueden encontrar con vida a sus seres queridos. “Necesitamos tener pruebas de ADN para que Fiscalía dé ahora sí [la confirmación] de que son ellos, que sea verídico, y no lo es. Hasta ahorita no lo es”, ha dicho una de las familiares de las víctimas.

Otro capítulo en el libro del horror de la violencia en México se ha escrito en Tamaulipas. Las incógnitas aún flotan sobre el aire. Su desenlace aún no tiene horizonte.