Polonia derriba varios drones rusos tras una “violación sin precedentes del espacio aéreo”
El primer ministro polaco, Donald Tusk, pide a la OTAN la apertura de consultas y afirma: “Es lo más cerca que hemos estado de un conflicto abierto desde la II Guerra Mundial”. Moscú sostiene que sus objetivos estaban en territorio de Ucrania

Polonia ha derribado por primera vez drones rusos en el marco de la guerra de Ucrania, que empezó hace tres años y medio. Una escalada de la tensión que de inmediato ha causado una gran sacudida en el seno de la OTAN. El Mando Operacional de las Fuerzas Armadas de Polonia informó este miércoles de que había abatido durante la noche varios aparatos no tripulados que circulaban en su espacio aéreo durante un bombardeo ruso contra Ucrania. Tras el monitoreo de estas aeronaves a través de sistemas de radar, se decidió neutralizar aquellos que representaban una “amenaza”. El mando militar calificó como “violación sin precedentes del espacio aéreo polaco” la acción de estos vehículos bomba. La interceptación de los drones ocasionó destrozos y pánico en al menos seis localidades del este de Polonia, y obligó a cerrar de forma temporal cuatro aeropuertos.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, tras celebrar junto a sus ministros una reunión extraordinaria de la Oficina de Seguridad Nacional, informó de que su país había solicitado a la OTAN la apertura de una ronda de consultas, una posibilidad recogida en el artículo 4 del tratado de su fundación, siempre que un Estado miembro considere que su “integridad territorial, independencia política o seguridad” se hayan visto “amenazadas”.
“No tengo motivos para afirmar que estemos al borde de la guerra, pero se ha cruzado una línea y es incomparablemente más peligroso que antes”, señaló Tusk. “Esta situación nos sitúa lo más cerca que hemos estado de un conflicto abierto desde la II Guerra Mundial”. El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, denunció el “comportamiento imprudente” de Rusia, informa Silvia Ayuso. “El análisis completo [del incidente] sigue en marcha, pero, fuera intencionado o no, se trata de un ataque imprudente y peligroso”.
Por la vía rápida, el Ministerio de Exteriores polaco presentó una queja formal ante el encargado de negocios de la Embajada rusa en Varsovia. Ya durante la tarde, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que trata desde febrero de mediar entre Moscú y Kiev, manifestó en su red social: “¿Qué hace Rusia violando el espacio aéreo de Polonia con drones? ¡Allá vamos otra vez!"

Según los registros del ejército polaco, fueron al menos 19 las violaciones del espacio aéreo cometidas durante la noche por los drones rusos. Las fuerzas de seguridad encontraron varios de estos aparatos dañados en media docena de localidades y “restos de misiles de origen desconocido”, según informó el Ministerio del Interior polaco. Las primeras pesquisas apuntan a que en la mayor parte de los casos se trataba de drones del modelo Gerbera, utilizados por el ejército ruso como señuelos en la primera fase de un ataque y, por tanto, sin carga explosiva.
Las primeras explicaciones de lo ocurrido las ofreció este miércoles el Gobierno de Bielorrusia, principal aliado de Moscú en la región. Las autoridades de Minsk defendieron que los drones se extraviaron debido a acciones de guerra electrónica (inutilización de los aparatos a través de interceptores electrónicos), y subrayaron que informaron tanto a Polonia como a Lituania del vuelo de los drones hacia la frontera.
El Ministerio de Defensa ruso, por su parte, en un mensaje muy ambiguo, manifestó que no tenía objetivo alguno en Polonia, informa Javier G. Cuesta. “Todos los objetivos designados [en Ucrania] fueron alcanzados”, señaló el departamento dirigido por Andrei Belousov, que remarcó que “el alcance máximo” de los drones utilizados este miércoles era de “700 kilómetros”, sugiriendo que no tenían capacidad para llegar hasta Polonia. “No obstante, estamos dispuestos a mantener consultas sobre este tema con el Ministerio de Defensa polaco”, añadió.
Colaboración de varios países
A primera hora de la madrugada, el ejército polaco anunció que, debido al desarrollo de una ofensiva rusa contra “instalaciones” en territorio de Ucrania, aparatos de su fuerza aérea y de varios socios de la OTAN estaban en situación de alerta con “carácter preventivo”, así como los sistemas de defensa antiaérea desplegados en el terreno. En las operaciones participaron aviones y equipamiento militar de Países Bajos, Alemania, Italia y la propia Alianza, además de los caza F-16 polacos. Era la primera vez que varios drones entraban a la vez en Polonia y proseguían su trayectoria varios kilómetros, más allá de la linde.
Tan solo unos minutos antes, canales de monitoreo ucranios habían señalado que varios drones de ataque rusos habían atravesado la linde del país y habían sido derribados por aviones de combate polacos. Según las web de rastreo aéreo ucranias, muy certeras en el análisis diario de los bombardeos rusos, aparatos no tripulados sobrevolaron, en primer lugar, el norte y oeste de Ucrania, para atravesar posteriormente la frontera hacia territorio de la Unión Europea y la OTAN.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, a partir de la información de la Fuerza Aérea de su país, detalló que la primera incursión de un dron ruso en Polonia tuvo lugar a las 00.50 (una hora menos en la España peninsular). Posteriormente, decenas de estos aparatos se aproximaron a la región oeste ucrania, algunos de ellos desde el espacio aéreo de Bielorrusia.
A última hora del martes, decenas de drones despegaron desde el sur de Bielorrusia y la frontera oeste rusa hacia el centro y oeste de Ucrania. Sobre las dos de la madrugada ya del miércoles, algunos de esos drones fueron derribados mientras sobrevolaban Kiev, la capital ucrania. La ofensiva rusa, ejecutada en agrupaciones o enjambres, lanzó una cantidad mayor de lo habitual de estos vehículos bomba hacia ciudades como Lviv o Lutsk, en la franja occidental, la que colinda con Polonia. Hacia allí partieron también gran parte de los 42 misiles que disparó el ejército ruso. Esto podría explicar que también se hallaran restos de este tipo de proyectiles en suelo polaco.
La Fuerza Aérea de Ucrania contabilizó durante la noche 415 drones de ataque de tipo Shahed (fabricación iraní) y Gerbera (los señuelos de producción rusa), así como de otros modelos, procedentes de posiciones militares de la Federación Rusa y la ocupada península de Crimea. Las defensas ucranias lograron derribar 386 de estos vehículos de ataque.
En lo que va de septiembre, Rusia ha lanzado alrededor de 3.000 drones contra territorio ucranio. Moscú batió todas sus marcas en la madrugada del pasado domingo al lanzar 810 drones contra prácticamente todas las regiones de Ucrania. El impacto de uno de ellos contra un inmueble en Kiev causó la muerte de tres personas, entre ellas una mujer y su bebé.
Cierre de aeropuertos
El aeropuerto de Rzeszów, en el este de Polonia, a unos 60 kilómetros del paso fronterizo hacia Ucrania, comunicó durante la noche su cierre temporal debido a la actividad aérea. Posteriormente y según una nota de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos, el aeropuerto internacional de Varsovia (Chopin) dejó de operar también por una “actividad militar no planificada relacionada con la garantía de la seguridad del Estado”. A estos dos aeródromos se unieron en el cese de operaciones los de Modlin y Lublin.

El Estado Mayor polaco instó a los ciudadanos a que no se acercasen, tocaran o movieran uno de estos aparatos en caso de toparse con ellos. “Estos objetos pueden seguir siendo peligrosos y deben ser inspeccionados por las patrullas de desactivación de explosivos”, alertó. La reconstrucción hecha por los diarios polacos de la noche sufrida en las localidades en las que impactaron los drones refleja momentos de pavor entre los vecinos. El periódico Gazeta Wyborcza mostró las imágenes del interior de una vivienda totalmente destrozada en la localidad de Wiriki Wola, pegada a la frontera ucrania.
Desde febrero de 2022, cuando Rusia lanzó la gran invasión contra el país vecino, Polonia ha mantenido sus cazas en alerta, en previsión de que la guerra atravesara la frontera. En varias ocasiones, algún dron ruso o fragmentos de uno de estos vehículos bomba han llegado hasta suelo polaco tras una gran ofensiva nocturna. El martes, el ministro de Defensa polaco, Władysław Kosiniak-Kamysz, manifestó que los drones que entrasen por la frontera este debían ser derribados. La víspera, las autoridades habían hallado los restos de uno de esos aparatos en la localidad de Polatycze, junto a la frontera con Bielorrusia.
La violación del espacio aéreo de estos drones eleva el riesgo a una escalada mayor de la tensión entre Occidente y Rusia. El acto de “agresión” cometido, como lo calificó el mando operacional polaco, podría ser objeto del artículo 5 del tratado de la OTAN. Esta cláusula establece el principio de defensa colectiva, afirmando que un ataque a uno de los países miembros de la Alianza será interpretado como un ataque a todos. Por el momento, Varsovia no ha solicitado su activación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
