Ir al contenido
_
_
_
_

Ocho personas, entre ellas dos bebés, mueren por inanición en Gaza, y ya son 281 las víctimas directas de la hambruna

Una niña de cinco meses fallece al no poder ser amamantada por su madre, también desnutrida. “Por el bien de la humanidad, déjennos entrar”, exige a Israel un responsable de la ONU

Un grupo de gazatíes desplazados hacen cola para recibir comida en Khan Yunis, en el sur de Gaza.Foto: HAITHAM IMAD (EFE)

Las muertes por hambre, ante el bloqueo a la entrada de ayuda impuesto por Israel, siguen aumentando en Gaza. El Ministerio de Sanidad de la Franja, controlada por Hamás, ha informado este sábado de que ocho personas han fallecido por inanición en las últimas 24 horas, después de que la ONU decretara el viernes oficialmente la hambruna en el enclave. Dos de estas víctimas son bebés, incluyendo una niña de cinco meses con parálisis cerebral que murió al no poder ser amamantada por su madre, quien padece también desnutrición.

Desde octubre de 2023, cuando Israel inició su ofensiva, las autoridades gazatíes han registrado 281 muertos por hambre; 114 de ellos, niños. Pero la mayoría de estos fallecimientos (216) se han producido desde principios de julio de este año, indicando una crisis de mortalidad creciente.

El viernes, Naciones Unidas declaró oficialmente la hambruna en Ciudad de Gaza y otros territorios gazatíes. La organización internacional dio ese paso después de que la Clasificación Integrada de Seguridad Alimentaria en Fases (CIF, en sus siglas en español), el sistema internacional apoyado por la ONU que calibra la situación alimentaria en el mundo, publicara un informe en el que confirmaba la hambruna sobre el terreno.

Decenas de palestinos cargan sacos de harina repartidos por un convoy de ayuda humanitaria en las afueras de Beit Lahiya, en el norte de Gaza, este sábado.

Este sábado, distintas agencias de la ONU han señalado a Israel con más contundencia aún. “Es el momento de que el Gobierno de Israel deje de negar la hambruna que ha creado en Gaza”, protestaba en un comunicado el secretario general de la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos, Philippe Lazzarini. De manera similar, su organización ha reiterado que “revertir la catástrofe” está al alcance de la mano. “Nuestros almacenes en Jordania y Egipto están llenos. Tenemos bastante comida, medicinas y suministros higiénicos para llenar 6000 camiones. El Estado de Israel nos tiene que dejar repartir ayuda en Gaza”, ha apuntado.

El jefe de la acción humanitaria de la ONU, Tom Fletcher, ha ido un paso más allá. “Esta es una hambruna abiertamente provocada por algunos líderes israelíes como arma de guerra”, ha dicho. “La hambruna de Gaza es la hambruna del mundo. Una hambruna que nos pregunta: ‘¿qué hiciste tú?’. Y que nos debe perseguir a todos”. Fletcher ha concluido su comunicado con una súplica: “Basta”, le dice a Israel: “Por el bien de la humanidad. Déjennos entrar”.

El Ministerio de Sanidad gazatí ha agradecido la decisión de la ONU de declarar la hambruna, “aunque lo haya hecho tarde”. “La inanición provocada es un elemento más del genocidio, que también incluye la destrucción sistemática del sistema de salud”, denuncian los responsables de Sanidad palestinos. “Cientos de muertes se podrían haber evitado, y las vidas de miles más están en juego. La comunidad internacional se enfrenta a la hora de la verdad”, subrayan.

Hamás, por su parte, ha emitido un comunicado en el que sostiene que en los últimos 25 días han entrado en Gaza “solo 2.187 camiones de ayuda humanitaria, de los 15.000 previstos, lo que significa que ha entrado menos del 15% de las necesidades reales”. Esos camiones “han sido objeto de saqueos y robos”, apunta la milicia.

Dos hombres empujan una silla de ruedas con sacos de harina descargados de un convoy de ayuda humanitaria en Beit Lahiya, en el norte de Gaza.

Las autoridades israelíes, que el viernes desacreditaron el trabajo del CIF y describieron la declaración de hambruna como una “mentira descarada”, continúan causando estragos en Ciudad de Gaza, donde la acción militar se traduce en expulsiones forzosas.

“Nos horroriza ver cómo las fuerzas israelíes intensifican su masacre en Ciudad de Gaza”, alertó el viernes Amande Bazerolle, coordinadora de emergencias de Médicos Sin Fronteras en Gaza. En una nota, Bazerolle describía “desplazamientos en toda la ciudad”, especialmente en los barrios más castigados por los bombardeos, como Zeitoun, donde Israel confirmó días atrás la presencia de sus tropas. “Es imposible imaginar algo más cínico: personas muriendo de hambre mientras las fuerzas israelíes invaden y destruyen cualquier rastro de vida que quede”, añadía Bazerolle.

Muchos en Israel temen que el avance de esa destrucción llegue hasta los escondites donde Hamás tiene secuestrados a los cautivos, y que eso signifique la muerte de los rehenes. El presidente de EE UU, Donald Trump, dijo el viernes que dos de los 20 cautivos que se cree que siguen con vida han fallecido. Las autoridades israelíes han negado tener constancia de ese hecho.

El Foro que aglutina a la mayoría de las familias de los rehenes ha convocado para este sábado protestas en la rebautizada como Plaza de los Cautivos de Tel Aviv. Pretenden mantener la presión sobre su Gobierno, después de que hayan pasado seis días desde que Hamás aceptó una propuesta de tregua planteada por los países mediadores (Qatar y Egipto) que el ejecutivo de Netanyahu todavía no ha analizado de forma oficial. “Es el momento de traer de vuelta a los 50 rehenes y terminar la guerra. Esta será la auténtica victoria de Israel”, dicen las familias en un comunicado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_