Así son los cinco candidatos favoritos a las elecciones francesas

Marine Le Pen, la jefa del Frente Nacional, se erige como la protectora de la clase trabajadora frente a la inmigración y las élites. En su campaña electoral ha promovido la mano dura con los inmigrantes y la protección de las fronteras. “Yo seré la presidenta que os proteja”, promete.

La capacidad de convocatoria de sus fieles más conservadores ha permitido a François Fillon salvar su carrera cuando ya ni su propio partido, Los Republicanos, apostaba por su candidatura, asediado por escándalos de presunta corrupción por los que la Justicia le ha abierto una investigación.

Emmanuel Macron es el candidato alquimista, el de la fusión de los contrarios. La izquierda y la derecha. El sistema y el antisistema. La continuidad y la ruptura. El liberalismo y la protección. El candidato centrista, favorito durante semanas, ha visto reducida su ventaja al final de la campaña.

El avance de Jean-Luc Mélenchon, el líder del movimiento Francia Insumisa, pone en duda todas las quinielas. La victoria este domingo ya no es algo inalcanzable, pero hace falta un esfuerzo final para movilizar a la inusual masa de indecisos en la que puede estar la llave del pase a la segunda vuelta.

El exministro de Economía Social y de Educación de Hollande ha sido la segunda gran sorpresa de estas elecciones. Benoît Hamon demostró el hartazgo de los socialistas de base al imponerse con un programa de izquierdas en las primarias del Partido Socialista. Pero ahora, es el candidato con menos posibilidades.