La importancia de poder elegir en cada momento la dirección y el sentido de la luz

El diseñador Antoni Arola (Tarragona, 1960) lleva toda la vida diseñando luminarias, pero lo que más le interesa no son las lámparas, sino la luz que proyectan. Por eso es uno de los colaboradores más fieles, persistentes e imaginativos de Simon, la casa catalana que nació como fabricante de mecanismos y en estos últimos años ha incorporado una innovadora línea de Iluminación Arquitectural. Es ahí donde Arola ensaya, año tras año, soluciones cada vez más radicales para reducir el impacto visual de cada artefacto y lograr que se funda con el ambiente.

Su nuevo proyecto es también uno de los más ambiciosos. Loop se basa en lo que Arola define como “la lámina más fina de luz nunca jamás diseñada”. Es decir, una pequeña placa que se une perpendicularmente a la pared mediante una base circular rotatoria y encastrada que, además, se puede pintar del mismo color que el muro gracias a una pestaña con imprimación. Esta base se puede girar hasta 360º, lo que permite elegir en cada momento la dirección y el sentido de la luz.

Loop es, como afirma su creador, “simple, mínima y pura”. También es múltiple: si se combinan varias unidades entre sí, el resultado es una composición lumínica que nunca deslumbra gracias a su luz difusa, efectiva y delicada, marca de la casa. Innovación, belleza y poesía de una empresa española que siempre ha sido pionera.