Las hermanas Delevingne enfadan a los fabricantes de champán con la campaña de su prosecco vegano

Las hermanas Delevingne, fundadoras de la empresa de bebidas espumosas Della Vite, han hecho enfurecer a los fabricantes de champán con su nueva campaña. Cara Delevingne (33 años), la más famosa de las hermanas británicas por su trayectoria en el modelaje, es conocida también por su carácter rebelde que, en esta ocasión, no ha sido la excepción. La última promoción de su prosecco vegano, que tiene como lema “Cheat on champagne (Engaña al champán)”, ha tenido como consecuencia una carta con una petición de cese y desistimiento de la asociación de la industria del champán, quienes afirman que las hermanas Cara, Poppy y Chloe Delevingne, están “dañando el prestigio asociado a la región de Champagne“. En la carta, a la que tuvo acceso The Times, el Comité de Champán escribe: “Cualquier uso del nombre internacionalmente reconocido ‘champán’ que no se refiera a los vinos espumosos que ostentan esta denominación, constituye una explotación indebida de su reputación”.

Es la mayor campaña publicitaria que han hecho las hermanas empresarias hasta el momento. El vino espumoso, una bebida de 750 ml que vale 25 euros, se produce en Valdobbiadene, una localidad al norte de Italia, en asociación con una familia de viticultores de tercera generación. Los anuncios de promoción estuvieron en las calles y pasearon en el metro y los autobuses de la ciudad de Londres, incluso en el aeropuerto de Londres-Heathrow. En diciembre de 2024, en una publicación en el Instagram de la compañía (que acumula casi 100.000 seguidores), escribieron: “Desde 2020, nuestra misión ha sido revolucionar el mundo del Prosecco con un vino exquisito, digno de ser el mejor rival del champán. Della Vite es el Prosecco que nunca olvidarás, porque, seamos sinceros, nunca has probado uno mejor”.

Unos meses después, en junio, las hermanas Delevingne recibieron una carta del Comité de Champán, que se define como defensor de los intereses comunes de las casas de la famosa bebida francesa, en la que exigen que dejen de mencionar la palabra champán en su publicidad. En lugar de ser un freno para ellas, las socias empresarias se negaron a ceder y han hecho más campaña a partir de este suceso. En la última publicación de las redes sociales de la empresa, han colgado una foto censurada de la carta, editada con un sello de “confidencial” y en la que solo se puede ver dos frases: “preocupados por el uso de su eslogan ‘Cheat on Champagne” y “pedimos que dejen de usar el nombre ‘Champán’ inmediatamente”. En la descripción, además, se lee: “Una carta de amor de nuestros amigos de Champán. Como dijo Oscar Wilde: ‘Lo único peor que ser el centro de atención es no serlo’. ¡Salud!“.

La modelo y actriz británica Poppy Delevingne (39 años), dijo a The Times que la campaña debía ser “divertida, pícara, y un poquito provocativa” y que “genuinamente no pensaron que le haría daño a nadie”. Aunque no esperaban que la campaña se hiciera famosa por la polémica, les “complace ver que la promoción está teniendo un impacto y llamando la atención”. “La severidad de la respuesta fue inesperada”, relata al periódico británico.

Sobre la decisión de convertir la carta en parte de la campaña, Numa Heathcote, directora ejecutiva y cofundadora de Della Vite, comentó al periódico británico: “Decidimos publicar porque la atención confirmaba que nuestro mensaje estaba llegando lejos. Della Vite siempre ha celebrado la confianza y la originalidad, así que quedarnos en silencio no nos parecía fiel a lo que somos. Vimos una oportunidad de convertir una carta seria en algo con lo que nuestra audiencia pudiera sonreír”.

Varios miembros del equipo de Della Vita respaldaron a las hermanas Delevingne. Tanto la directora de marketing, Izzy Maxwell, como Heathcote, aseguran “respetar profundamente la tradición de champán”, aunque, coinciden, “hay una nueva generación de consumidores que está definiendo el lujo a su manera, y marcas como Della Vite forman parte de ese cambio”. Y es que el público objetivo de la marca de bebidas espumosas son los jóvenes. “Existimos para la nueva generación de bebedores que buscan diversión sofisticada sin esnobismo: lujo accesible y calidad excepcional”, declaran al periódico británico.