Katy Perry y Orlando Bloom se separan tras nueve años de relación

Después de casi una década de relación, seis años de compromiso (pero con una boda que jamás llegó) y una hija en común, Orlando Bloom y Katy Perry se separan. La pareja llevaba un tiempo distanciada y, según confirma la revista People, la relación ya está rota.

Anteriormente, la revista estadounidense US Weekly aseguraba la ruptura citando a la que, decían, era una fuente cercana a la pareja: “Katy y Orlando se separaron, pero son amigos”, ha confirmado esta persona a la que ha tenido acceso exclusivo la publicación: “No hay conflicto por ahora. Katy, por supuesto, está disgustada, pero aliviada de no tener que pasar por otro divorcio, ya que ese fue el peor momento de su vida”, añade la fuente de US Weekly. Otra información de TMZ del pasado martes apuntaba también a que Bloom acudiría como soltero a la boda de Jeff Bezos y Lauren Sanchez.

Según la fuente de US Weekly, la separación “se ha hecho esperar” y la relación “ha sido tensa durante meses”. Añade además que Perry se está “manteniendo ocupada” en la gira y revela que, mientras está fuera, la cantante está “alquilando” su propiedad Westcott en Montecito, California. “Ella y Orlando siempre han vivido en su otra casa de Montecito como su residencia principal”, asegura la fuente, que agrega que la ahora expareja “planeaba hacer de la casa de los Westcott su hogar familiar, pero los planes han cambiado” y “han estado viviendo separados desde que Katy está de gira”.

La distancia entre el actor y la cantante llevaba notándose semanas. Fue factible que, cuando Perry decidió, el pasado mes de abril, realizar su corto viaje espacial de la mano de Jeff Bezos y su polémica misión espacial con su empresa Blue Origin (en la que también voló durante apenas 10 minutos su prometida, la empresaria Laura Sanchez), Bloom no estuvo presente. Ella sí recordó durante el vuelo a su hija, Daisy, llevando una margarita (daisy, en inglés), pero ni rastro del protagonista de El señor de los anillos. Según filtraron informaciones posteriores, a él no le hizo gracia ese viaje, que según algunos tabloides estadounidenses llegó a tachar de ridículo.

En los últimos días, otra cuestión que ha generado muchos comentarios es la de que él acudirá solo a la boda de Bezos y Sanchez, que se celebrará este fin de semana entre grandes fastos en Venecia. La cantante es buena amiga de la novia, tanto por ese comentado viaje espacial como porque pasó con ella buena parte de su despedida de soltera en París, bien publicitada en redes sociales. Sin embargo, la cuestión de que Bloom acuda sin Perry tiene una causa mucho más simple. La cantante está embarcada en una gira mundial que esos días la lleva por Australia, y de hecho el fin de semana de los festejos tiene varios conciertos en la ciudad de Perth, lo que hace que sea prácticamente imposible que llegue a tiempo a los festejos en Italia.

Desde el año 2016, Perry y Bloom han mantenido una relación de manera intermitente. Salieron varios años, pero cortaron para comprometerse en febrero de 2019, en San Valentín. Lo contaron ellos mismos en sus redes sociales, y la madre de ella lo confirmó poco después. La boda nunca se celebró, pero tienen a su hija como vínculo. La pareja anunció el embarazo en marzo de 2020, y la pequeña nació en verano de ese año. La primera vez que se vio juntos al actor y la intérprete de I Kissed a Girl fue en una fiesta posterior a los Grammy, en 2016 y, poco después, en una escapada a Hawái. Pero un año después, en la primavera de 2017, sus representantes anunciaron su ruptura. Fue un año después, ya casi a mediados de 2018, cuando retomaron la relación y se les vio paseando juntos por las calles de Praga. Al año, llegaba el compromiso. Uno después, el embarazo. Cinco más adelante, la ruptura.

La pareja no ha llegado a casarse, pero ambos han vivido antes sonados matrimonios que acabaron en rupturas. En el caso de Perry, californiana de 40 años, estuvo casada durante poco más de un año con el cómico británico Russell Brand. Su extravagante boda tuvo lugar en la India en octubre de 2010 y su divorcio llegó apenas 14 meses después, en diciembre de 2011. En el caso de Orlando Bloom, el actor británico de 48 años estuvo casado durante tres años con la modelo australiana Miranda Kerr, después de una relación de seis años. Se separaron en octubre de 2013 y mantienen una sólida amistad, también por el bien común de su hijo, Flynn, que ya tiene 14 años.