Tortas de alma, el dulce de Teruel para preparar cuando llega el frío
Están rellenas de calabaza y las puedes encontrar en las pastelerías aragonesas todo el otoño. También puedes aprender a hacerlas en casa con esta receta.


El alma para algunos es algo muy profundo, a veces espiritual, que trasciende al cuerpo. En Teruel, el alma es algo mucho más terrenal. Según el Diccionario enciclopédico de la vida rural de Andorra, escrito por Ángel Cañada, “se considera como alma a la pulpa que se obtiene de estos dos tipos de calabaza: la de cabello de ángel y la calabaza naranja”.
Este es el relleno de uno de los dulces más preparados en las casas turolenses, las tortas de alma. Empanadillas de masa de aceite y anís rellenas de cabello de ángel o de compota de calabaza. En su elaboración confluyen dos momentos: la llegada de las calabazas a las huertas aragonesas y el día de Todos los Santos. Hoy, se preparan durante todo el otoño y en muchas pastelerías pueden encontrarse a lo largo de todo el año.
Cuando te enseñan a hacer tortas de alma –que también reciben en otros lugares el nombre de casquetas, empanadonicos o pastissets–, las indicaciones suelen ser algo parecidas a esto: “tú añade un vaso de aceite y otro de anís y vas echando la harina que aguante”. Entiendo que esto puede ser un poco difuso, así que voy a dar las cantidades lo más ajustadas posible. Como en todas las recetas tradicionales, aquí hay mucho de maña y repetición. Pillarle el punto a la masa, cocinar el relleno hasta obtener la textura correcta, hornear las tortas con el tostado perfecto… por suerte, queda mucha calabaza por delante.
Dificultad: Podríamos decir que es más difícil que hacer un bizcocho
Ingredientes
- 400 g de harina
- 200 ml de aceite de oliva virgen extra
- 100 ml de licor de anís
- 50 g de azúcar para la masa, 200 g para el relleno y más para espolvorear
- 1 kg de calabaza
Instrucciones
Cortar la calabaza en dados y asarla a 180ºC durante 30 minutos.
Colocar la calabaza en una olla junto al azúcar para el relleno.
Cocinar durante 10 minutos sin parar de remover. Retirar del fuego y dejar enfriar.
En una olla calentar el anís, el aceite y el azúcar para la masa. Cuando llegue a punto de ebullición, añadir la harina y escaldar. Remover con energía hasta que la masa se separe de las paredes de la olla.
Transferir a una superficie limpia y amasar durante cinco minutos. Colocar en un bol y dejar reposar durante 30 minutos.
Dividir la masa en bolas de unos 60 gramos.
Estirar una bola de masa.
Colocar una cucharada de relleno en el medio. Doblar formando una empanadilla y cerrar el borde pegando bien ambos lados, pero sin doblarlos.
Disponer en una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado y hornear a 190ºC durante 15-20 minutos, con calor arriba y abajo, hasta que los bordes empiecen a dorarse.
Una vez fuera del horno, espolvorear azúcar abundante por encima y dejar enfriar.
Si tienes dudas o quejas sobre nuestras recetas, escríbenos a elcomidista@gmail.com. También puedes seguir a El Comidista en Youtube










































