Hamburguesas de salmón: cómo comer pescado fresco sin enterarse
Los bocadillos son una manera sencilla y atractiva de tomar este u otros pescados. Puedes acompañarlas con tu pan, salsas y añadidos favoritos
Sabemos que el salmón es un pescadito versátil a más no poder, aunque los especímenes de piscifactoría a los que tenemos acceso el común de los mortales no sean del agrado de los más sibaritas. Pero, bien sazonado, es un pescado azul fuente de muchas bondades nutricionales: ¿sabes cuáles son dos de las características principales de las poblaciones longevas del planeta? Que comen mucha verdura, legumbres y también pescado azul. Fíjate tú.
Una forma interesante de comer salmón es prepararlo en forma de hamburguesa, una versión sencilla, divertida y muy atractiva para que hasta los menos convencidos coman pescado, además nos viene al pelo en verano si nos atrevemos a encender una barbacoa. Se sazona convenientemente el pescado y lo acompañamos con crema agria con hierbas picadas, tzatziki de pepino, guacamole, coleslaw o ensaladas de frutas, dentro o fuera de un bollo de pan, y a disfrutar.
Tiempo: 20 minutos
Dificultad: No pasarte de cocción para que no se seque la hamburguesa
Ingredientes
Para 4 hamburguesas
- 500 g de salmón fresco
- 2 lonchas de salmón ahumado (opcional)
- 1 guindilla encurtida (opcional)
- 1,5 cebollas moradas pequeñas
- Un puñado de perejil, eneldo o cilantro fresco
- 2 dientes de ajo
- Sal al gusto
- Pan rallado
- Aceite de oliva
- 4 bollos de hamburguesa
- El zumo de 1 limón
Instrucciones
Exprimir el zumo del limón y ponerlo en un bol. Cortar la media cebolla morada en aros y ponerla a macerar en el zumo.
En un robot o trituradora de cocina, triturar la guindilla encurtida, la cebolla morada, el cilantro/perejil/eneldo y el ajo; o picar/majar todo a cuchillo o en mortero.
Agregar el salmón cortado en cubos grandes y la sal (y el salmón ahumado en trozos, si se pone; ojo con la sal entonces, porque el salmón ahumado aporta bastante). Pulsar varias veces hasta que el salmón se haya picado groseramente, o picarlo a cuchillo.
Añadir pan rallado al conjunto poco a poco, integrando con el resto de los ingredientes con espátula, hasta dar con el punto deseado de cohesión.
Dividir la mezcla en cuatro partes iguales. Con las manos y mucho cariño, formar una hamburguesa con cada porción. Si se prefieren hamburguesas más pequeñas, dividir la mezcla en seis.
Para cocinar las hamburguesas hay varias opciones:
a. En la placa de cocina; calentar una sartén antiadherente pintada de aceite de oliva. Tostar las hamburguesas a fuego medio de tres a cuatro minutos por cada lado. Deben quedar tostadas por fuera y rosadas por dentro.
b. Al horno; poner las hamburguesas en una bandeja de horno con papel vegetal. Untar con aceite de oliva y hornear a 220 °C durante 10 minutos como mucho, dándoles la vuelta a la mitad del tiempo.
c. A la barbacoa; cocinar las hamburguesas pintadas con aceite de oliva en la parrilla de la barbacoa hasta que se tuesten por fuera.
Tostar los bollos de hamburguesa en tostadora o en sartén con una pizca de aceite de oliva o mantequilla.
Escurrir los aros de cebolla del líquido de maceración.
Montar la hamburguesa colocando el salmón en la mitad inferior del bollo (si se quiere, untando alguna salsa en la base), coronando con alguna otra salsita y la cebolla macerada. Acompañar con más verduras o salsa al gusto, y tapar con la mitad superior del bollo. Devorar sin anestesia.
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