Cataluña corrige y cerrará 35 aulas menos de las anunciadas

Como pasa cada año, una vez finalizado el proceso de adjudicación de plazas escolares, el Departamento de Educación de la Generalitat se ha visto obligado a corregir el recorte inicial de aulas anunciado, que era de 111 grupos, y finalmente serán 76. De estos, 35 grupos que se han salvado del cierre, 23 corresponden a Infantil3 y 12 a la ESO, según ha informado este lunes Educación. Con todo, el descenso de natalidad continúa cebándose con las escuelas y este año se han recibido 134.145 solicitudes, 4.000 menos que el año pasado. En detalle, según niveles y titularidad, en Infantil3 se han recibido 36.424 para centros públicos y 17.801 para la concertada; y en 1º de ESO se han presentado 46.378 y 6.572, respectivamente (aquí la gran diferencia es que la mayoría de concertadas son instituto escuela, así que los alumnos no realizan inscripción).

Ello tendrá un efecto en el cierre de aulas, ya que, a pesar de la corrección hecha, no se evita que de cara al próximo curso haya 20 grupos menos en I3 y 56 menos en 1º de ESO, respecto a los actuales en la escuela pública. En cuanto a la concertada, habrá que esperar a que el curso está iniciado para cerrar completamente las matrículas y ver si las aulas cumplen el mínimo exigido (14 alumnos) para mantener el concierto educativo.

A mediados de febrero, el Departamento de Educación anunciaba el cierre de 111 grupos para el próximo curso: 43 de Infantil3 y 68 de 1º de ESO (la primera vez que la secundaria se ve más afectada que infantil) y empezaron las protestas de familias y escuelas, que consideran precipitado estos anuncios de cierres preventivos, sin tener en cuenta la matrícula viva -los alumnos que llegan a mitad de curso-, que supone una cifra nada despreciable: en lo que va de curso se han incorporado 74.328 alumnos -ya sea por cambios de domicilio o por llegadas desde el extranjero-, según detalló la consejera Esther Niubó hace unas semanas en el Parlament.

Pero detrás de las cifras aportadas por Educación, hay historias agridulces, ya que escuelas afectadas han logrado, finalmente, salvar un grupo gracias al alto volumen de inscripciones, pero otras se han quedado en el camino, o incluso alguna ha recibido la desagradable sorpresa de que pierde.

Un ejemplo es Mataró, donde inicialmente se había anunciado el cierre de un aula de Infantil3 en las escuelas Rocafonda y Camí del Mig. Este último centro ha logrado romper las previsiones del Departamento de Educación y ha logrado 35 solicitudes, según las familias, lo que le ha permitido mantener los grupos intactos. Pero con un efecto colateral: “En Mataró hemos salvado una línea a costa de cerrar otra. Han tenido tiempo de hacer una planificación, pero hay improvisación y cambios de opinión. Y nos dejan en una posición fea, motivando la competencia entre escuelas públicas. El año que viene será como los juegos del hambre, porque ya nos avanzado que es posible que cierren cuatro grupos”, expresa Jordi Esquerra, miembro del AFA de Rocafonda.

El efecto colateral lo ha sufrido la escuela Antonio Machado, que a mediados de mayo reciben la noticia que les cierran una línea porque han tenido 18 solicitudes. “Hasta ahora teníamos lista de espera, este año hemos tenido mala suerte porque hay menos hermanos, el día de las puertas abiertas llovió, pero también creemos que ha habido un trasvase al Camí del Mig, para evitar el cierre, y a lo mejor no hemos vendido bien el proyecto pedagógico”, lamenta Andrea Lissidini – presidenta AFA Antonio Machado. Esta madre lamenta que un edificio nuevo, como el de su escuela, quede “infrautilizado”, ya que “puede acoger hasta tres líneas y se queda solo con una, además tiene una ubicación central en el municipio”.

En Moià se ha vivido también una situación particular. A partir de los 40 alumnos que, según el padrón, tenían que matricularse en septiembre en I3, el Departamento previó repartirlos a partes iguales en un aula pública y una concertada, lo que suponía cerrar una de las dos líneas de la escuela pública. Pero durante el proceso de inscripción, este centro ha recibido 28 peticiones y el privado, 12. Educación admite que tras la insistencia de las familias a no matricularse en la concertada, y así reequilibrar los grupos, finalmente se mantendrán intactas las líneas.

Educación ha informado que algunos de los municipios que recuperan líneas son Lleida, Santa Coloma de Gramenet, el Prat de Llobregat, Tàrrega o Tremp. También Terrassa, que fue uno de los municipios más afectados por el cierre inicial. En marzo se anunció la pérdida de dos grupos de Infantil3 y siete de ESO. A pesar de la oposición al anuncio de familias y ayuntamiento, Educación ha confirmado que solo se salva una de las dos líneas de infantil, mientras que en secundaria se mantiene igual de lo anunciado.

Tampoco ha recibido buenas noticias el Joan Solans de Granollers, que finalmente ofrece ocho plazas, ocupada por hermanos, una decisión que para las familias supone el inicio del cierre de la escuela.