Cataluña cambia de criterio una semana antes de la Selectividad y las faltas no descontarán en las asignaturas no lingüísticas

La Selectividad es época de nervios y de inquietud. Este año, todavía más, por la reforma integral en que están inmersas las Pruebas de Acceso a la Universidad y que los alumnos conocieron ya arrancado el curso, lo que implicó que los profesores no pudieran prepararse bien en septiembre. Pero a falta de una semana, el Departamento de Universidades ha sorprendido con la rectificación de la normativa, anunciando que las faltas de ortografía no restarían de la mayoría de materias, solo lo harán en las asignaturas de lengua y literatura. “Al final, la ortografía no descontará en el resto de materias porque se ha decidido así”, aseguró ayer la consejera de Investigación y Universidades, Núria Montserrat.

El Departamento de Universidades presentó este miércoles las novedades de las pruebas, y la confusión llegó en el momento de especificar el descuento por las faltas de ortografía o de corrección gramatical, algo que aplican el resto de Comunidades Autónomas, en aplicación del nuevo Real Decreto 534/2024 sobre la Selectividad. “Lo que se está haciendo es aplicar la normativa”, insistió la consejera.

La confusión se da porque el mismo Departamento publica en su web la normativa de las PAU de este curso, en que se indica que las faltas restarán de forma generalizada en todas las asignaturas hasta un 10% de la nota, a excepción de las materias de lengua y literatura, en que cada fallo restará 0,1 punto, hasta un máximo del 20% de la calificación del examen. “En otras materias como Historia, Historia de la Filosofía o Geografía, este año se ha considerado mejor no aplicar el descuento por faltas de ortografía. Como se ha hecho siempre en estas materias, lo que se valora es la coherencia de la respuesta. No se resta un 10%, sino que se descuenta lo que valga el ejercicio”, explicó la jefa de la Oficina de Acceso a la Universidad, Mònica Garizuain,

Con todo, la rectificación del Govern supone para los alumnos una inyección de tranquilidad ante las pruebas que tendrán lugar del 11 al 13 de junio. A ellas se presentan 44.238 estudiantes, lo que supone 1.700 más que el año pasado y este es el cuarto año consecutivo que se bate el récord de inscritos. De este total, la gran mayoría (33.904) proviene de bachillerato, mientras que el resto se reparten casi a partes iguales entre los que suben de FP (5.267) o la matrícula libre (5.067). Para llevar a cabo los exámenes se han habilitado 221 tribunales en 31 municipios y contará con más de 2.400 docentes dedicados a la vigilancia y corrección.

Las pruebas presentan otras novedades, como el hecho de que solo habrá un modelo de examen, este será más competencial y menos memorístico, habrán más preguntas abiertas y desaparecen las lecturas obligatorias en las materias comunes de Lengua y Literatura, tanto castellana y catalana.