Los taxistas piden a la administración que regule la oferta

El sector del taxi sigue preocupado por la viabilidad de su negocio con la caída drástica de clientes e ingresos a causa de la pandemia de coronavirus, las restricciones de movilidad y el desplome del turismo. Con 10.521 licencias de taxi en el área metropolitana de Barcelona y casi 13.400 taxistas, la oferta es muy superior a la demanda en un sector que en los últimos meses ha llegado a caer entre un 60% y un 80%. “No podemos estar todos en la calle peleando por unos pocos clientes”, señalan fuentes de asociaciones del sector.

Durante el estado de alarma, las medidas previstas por el Gobierno ya contemplaban la reducción de los taxis en las calles. En el área de Barcelona, la flota que circulaba se redujo al 20% al principio y al 30% en las últimas semanas. Pero los taxistas avisaron que la reducción de la flota sería necesaria también después de que terminase el estado de alarma, y pidieron ya en junio al Insitituto Metropolitano del Taxi (Imet) que redujese la oferta. Normalmente, de los 10.521 taxis que circulan por la ciudad, solo salen a la calle cada día unos 8.000, y el resto está en días de descanso. El sector pedía que solo circulase el 60% de la flota.

Después de llegar a un acuerdo con el Imet en junio, los taxistas denuncian que durante el mes de agosto han tenido que autorregularse en la oferta de taxis que salían a la calle, que se ha ceñido al 60% de la flota. En un comunicado conjunto, asociaciones y sindicatos del taxi instaron a la administración, y en particular a la Imet, a tomar cartas en el asunto y liderar la regulación de la oferta. “Creemos que es una temeridad mantener el 100% de la flota en la calle”, señala el comunicado, que recuerda la “dramática situación” que está viviendo el sector.

”Hecho excepcional”

Según los taxistas, el acuerdo al que llegaron las diferentes asociaciones del sector para regular la oferta es “un hecho excepcional”. Por este motivo reclaman al Imet que se ocupe de esta cuestión. “Instamos de nuevo al Imet, como máximo responsable de la administración y gestión del servicio del taxi en el área metropolitana de Barcelona, a que impulse los cambios reglamentarios que sean necesarios para regular el servicio”, subraya el comunicado. Las asociaciones además abren la puerta a movilizaciones y advierten de que si la administración no se encarga de regular el sector, los taxistas se reservan “el derecho de adoptar lsa medidas que sean necesarias en defensa del sector”.