La portavoz del grupo socialista andaluz presenta una denuncia a la Fiscalía por delito de odio en las redes

“Qué bien mueve la mano”, “fijaos en el gesto de la mano cuando habla y sabréis cómo llegó ahí”, “ya la boca y la mandíbula hasta dónde la abres???? Y la lengua”, “... Otra con las rodillas peladas”, “pues le han callado bien con una buena p@lla en la boca”, “así haces las pajas???”, “¿está haciendo una pajilla?”, “parece que sabe tocar la zambomba”, “y esta frutita tan fresca de donde salió ahora”, “podéis mostrar esas imágenes???? Es que las PUTAS de Sánchez no tenéis credibilidad”, “¡Ojú! Es conocida como ‘Paja-Expres’”. Estos mensajes publicados tanto en su perfil personal como en las cuentas oficiales del PSOE de Andalucía han llevado a la portavoz del grupo socialista del Parlamento regional, María Márquez, a presentar este lunes una denuncia ante la Fiscalía Provincial de Sevilla “por delitos motivados por el odio y la discriminación por razón de género”.

Márquez asegura que en los últimos meses, pero especialmente desde el debate sobre política general celebrado en el Parlamento el pasado 12 de junio, ha sido objeto de una “campaña masiva, pública y coordinada de acoso sexista en redes sociales”, desarrollas en Facebook, Instagram y X (antiguo Twitter).

La portavoz parlamentaria y también vicesecretaria general del PSOE andaluz acompaña la denuncia con un recopilatorio de los mensajes así como los nombres de las cuentas, la mayoría de ellos no identificables. “Su contenido y finalidad constituyen una forma clara y directa de violencia simbólica y digital de género, que se manifiesta a través de ataques personales cuya motivación es exclusivamente el hecho de ser mujer y ejercer una posición de liderazgo público”, sostiene en su denuncia.

Márquez advierte del “efecto multiplicador” de estos insultos que afectan, afirma, no solo a ella, sino que “envía un mensaje de advertencia a todas las mujeres que se atreven a ocupar espacios de visibilidad política: el coste será la violencia”. Y añade: “No soy la única mujer que lo sufre. Pero me niego a callar”.

En la denuncia, la dirigente socialista cita varios artículos del Código Penal para solicitar la actuación de la Fiscalía: incitación al odio y la discriminación por razón de sexo; atentando contra la integridad moral; e injurias graves proferidas con publicidad. También cree que debe aplicarse el agravante de género dado que el ataque responde, en su opinión, a su condición de mujer con liderazgo político.

Además de reclamar a la Fiscalía la apertura de una investigación penal solicita que “se requiera a la plataforma X, Instagram y Facebook, a través de los mecanismos de cooperación judicial y policial para la identificación de los titulares de los perfiles desde los que se emitieron los mensajes” que recoge en la denuncia y que aparecen al inicio de este texto.

Márquez añade una tercera petición a la Fiscalía para que inste a las citadas plataformas a “retirar de forma inmediata los contenidos vejatorios y de carácter sexista” por “constituir contenidos manifiestamente ilícitos que vulneran derechos fundamentales, por tratarse de contenidos manifiestamente ilícitos que constituyen discurso de odio, acoso por razón de género y ataques contra la dignidad de una mujer con responsabilidad institucional”.