El PSOE suspende de militancia y abre un expediente disciplinario al líder del partido en Torremolinos, acusado de acoso sexual
La decisión de la Comisión Ejecutiva Federal del partido contra Antonio Navarro llega después de que lo solicitara la dirección provincial de la formación


El PSOE ha suspendido de militancia a su secretario general en Torremolinos (Málaga, 70.933 habitantes), Antonio Navarro, denunciado por una mujer de presunto acoso sexual. El motivo que alega el partido, que también ha iniciado un expediente disciplinario, es la apertura de diligencias por parte de la Fiscalía de Violencia contra la Mujer de Málaga, como recoge una resolución de su Comisión Ejecutiva Federal firmada este jueves por Rebeca Torró, secretaria de Organización y Acción Electoral, y Borja Cabezón, secretario adjunto de Organización, Transparencia y Acción Democrática. La dirección socialista había conocido el caso en junio, de ahí que este jueves, la vicepresidenta primera del Gobierno y secretaria general del PSOE en Andalucía, María Jesús Montero, reconociese que “algo tan humillante como las cuestiones que se han conocido requieren de una mayor celeridad”.
La decisión de la dirección socialista, que no conlleva la expulsión de Navarro, pero sí la pérdida del cargo de secretario general en Torremolinos de manera cautelar, llega después de que se hiciera pública la denuncia, realizada por una militante del partido. Presentó un escrito con decenas de frases que supuestamente le dirigió el líder del PSOE en Torremolinos en el contexto de conversaciones laborales, pero que el hombre iba luego derivando hacia otros temas. La mayoría de ellas se produjeron a través de WhatsApp y se remontan a septiembre de 2021. “No me esquives, que te quiero meter ficha”, le decía durante una conversación de trabajo. También otras como: “Lo a gusto que estaríamos ahora con una copa de vino y un sofá”, “Es que estás muy buena” o “¿Ese escote lo has tenido siempre?”. Navarro es también concejal del municipio desde 2019 y diputado en la Diputación Provincial desde 2023. Hasta este momento mantiene ambos cargos.
La víctima realizó su denuncia ante la Fiscalía de Violencia contra la Mujer el pasado 10 de noviembre, aunque ya la había presentado ante su partido, por cauces internos, en el mes de junio. En él relataba una serie de hechos que, en su opinión, son constitutivos de un presunto “delito de agresión de naturaleza sexual” porque Navarro, aseguraba, pretendía “obtener favores de naturaleza sexual no deseados ni consentidos”, por ella. La víctima, además, destacaba “el ambiente humillante, degradante, hostil y de presión psicológica insoportable” que sufría. La formación política abrió entonces una investigación, creó una comisión específica para el caso y citó a las partes en audiencia, pero no había tomado todavía ninguna decisión. En octubre, la mujer volvió a insistir al PSOE y ya en noviembre acudió a la Fiscalía, que decidió abrir diligencias para recabar más información y así concluir si presenta cargos contra el denunciado o archiva el caso.
Solo cuando los hechos se hicieron públicos, la dirección provincial socialista lamentó lo ocurrido y, al día siguiente, pidió a Navarro que pusiera a disposición sus cargos institucionales de manera inmediata. Ahora el partido le suspende de militancia. La resolución precisa que del análisis de la información conocida, “sin perjuicio de otros hechos que podrían aparecer”, se desprende que presuntamente podría haber incurrido en lo establecido en dos artículos del Estatuto Federal, calificados como falta grave y como falta muy grave por supuesta “mala conducta cívica o ética”. Por eso, además, le abre expediente disciplinario.
“¿Ese escote lo has tenido siempre?”
La denuncia de la militante socialista ante la Fiscalía señalaba que en el último trimestre de 2021, comenzó a recibir “mensajes de contenido sexual, insinuaciones y proposiciones no deseadas ni consentidas”, que le generaron “un ambiente intimidatorio, degradante y humillante”. Unos mensajes enviados en el entorno laboral y “también en horario nocturno y fuera del ámbito laboral” que relató en un largo documento. “No me esquives, que te quiero meter ficha”, le decía durante una conversación de trabajo. “Lo a gusto que estaríamos ahora con una copa de vino y un sofá”, le insiste mientras la mujer trata de obviar el comentario y reconducir la conversación. “Es que estás muy buena”, le dice para preguntarle posteriormente: “¿Ese escote lo has tenido siempre?”.
La víctima también asegura que Navarro le tocó el culo sin su consentimiento y que ella rechazó ese gesto, avisando de que informaría a la dirección del partido si insistía. Más tarde, él intentó pedirle disculpas y llegó a enviarle alrededor de medio centenar de mensajes durante casi cinco horas. Y que durante los días posteriores, entre asuntos profesionales, insistía con mensajes como estos: “Cuando te enfadas te pones muy guapa”, “Iré depilado por si tienes un desliz” o “Te ponía ahora de vuelta y media”. Para la denunciante, todos estos hechos podrían constituir un delito de acoso sexual y delitos de coacciones y acoso reiterado; además de que en su caso podrían enmarcarse dentro de la violencia de género
“No vamos a tolerar ningún comportamiento que suponga acoso alguno a una mujer. El PSOE es un espacio libre de acoso y un espacio de seguridad para todas las mujeres”, señaló el jueves por la mañana Josele Aguilar, secretario general del PSOE de Málaga. A sus palabras se unieron, por la tarde, las de la vicepresidenta primera del Gobierno y secretaria general del PSOE en Andalucía, María Jesús Montero, durante una visita precisamente a Málaga. “Tenemos que mejorar esos procedimientos para que sean más ágiles y sobre todo para que permitan que la víctima se sienta acompañada durante todo este proceso que es algo que yo creo que se ha puesto de manifiesto estos días y que por supuesto tomamos nota”, reconoció ayer. “Algo tan humillante como las cuestiones que se han conocido requieren de una mayor celeridad” subrayó.
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