Málaga acaba con los paseos turísticos en coche de caballos
El ayuntamiento revoca las últimas licencias que quedaban a cambio de una indemnización a los cocheros que supera los cuatro millones de euros


Málaga ha puesto fin a los coches de caballos con fines turísticos. El alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, ha anunciado este lunes que el ayuntamiento ha llegado a un acuerdo con los titulares de las 25 licencias que quedaban en vigor “para adelantar el fin de la actividad previsto inicialmente para 2035”, según ha explicado el regidor en redes sociales. Cada propietario recibirá una compensación superior a los 125.000 euros a cambio de que cese ya el servicio. Es decir, que el punto final a la presencia de estos vehículos en las calles supone un gasto de algo más de tres millones de euros, al que hay que sumar otro millón por las licencias revocadas anteriormente. Los coches de caballos siguen funcionando, mientras tanto, en otras ciudades andaluzas como Sevilla, Jerez o Ronda. “Pero en Málaga ya no hay. Se acabó”, confirma el portavoz de los cocheros, Antonio Domínguez.
La presencia de los coches de caballo en Málaga ha sido objeto de polémicas desde hace más de una década. En 2015, de hecho, Ciudadanos solicitó —sin éxito— su sustitución por vehículos de época eléctricos porque “los animales sufren el estrés del tráfico, la contaminación, los ruidos y existe un riesgo evidente de atropello al tener que afrontar recorridos por vías muy transitadas”. De octubre de aquel año es la ordenanza municipal que rige el sector, que preveía que los 55 permisos existentes entonces tuviesen una duración limitada a 20 años. El debate ha surgido y desaparecido de forma periódica desde entonces, sobre todo en verano, cuando los equinos sufren más por el calor. Hasta que el pasado mes de enero, el propio De la Torre aseguró que tenían sus días contados en Málaga porque ya se negociaba con los propietarios de las últimas licencias para cesar la actividad lo antes posible. “Damos este paso pensando en el bienestar de los animales y en la imagen que la ciudad ofrece al mundo”, decía entonces el alcalde. “Málaga ha evolucionado y ahora hay muchas formas sostenibles de recorrerla”, añadía este lunes en un vídeo publicado en Instagram.
De las 55 licencias iniciales que había hace diez años, poco a poco se fueron rescatando —de manera voluntaria y previa indemnización a los titulares— hasta 30 de ellas. Ahora quedaban 25, cuya revocación “ha venido determinada por la incompatibilidad de la actividad del servicio de paseo en coches de caballos con el desarrollo de la ciudad en condiciones de seguridad y salubridad, tanto para los usuarios de la vía pública como para los propios animales”. Tenían permiso para seguir trabajando durante una década más, así que a cambio de finalizar el servicio, los cocheros han recibido una indemnización que asciende a algo más de 125.000 euros por cada licencia, cifra que fue establecida tras una auditoria realizada en febrero de este mismo año. El ayuntamiento asegura que la revocación de estas y las 30 licencias anteriores han supuesto un coste total de 4,1 millones de euros.
Queda por conocer ahora cuál será el destino de los caballos, ya que el sector cree que si no prestan este servicio muchos acabarán en el matadero debido al alto coste que supone mantener a estos animales, a los que desde hoy no podrán sacar rendimiento económico. Fuentes municipales subrayan que eso es “responsabilidad de los propietarios”. El portavoz de los cocheros, Antonio Domínguez, asegura que “aún quedan cosas por definir” del acuerdo. Lo que está claro es que esta misma mañana se está eliminando hasta la señalización vertical que indicaba las zonas reservadas para los coches de caballos en la calle Cortina del Muelle, así como en el Paseo de los Curas y la avenida Cervantes, que serán sustituidos por aparcamientos para motos.
“Valoramos positivamente la decisión del Ayuntamiento de Málaga”, han indicado desde el Partido Animalista con el Medio Ambiente (Pacma). “La protección animal tiene que ser transversal y no asociarse a ninguna ideología que solo busque el oportunismo electoral a costa de los animales. Es la única forma de acabar con el maltrato animal”, han añadido en sus redes sociales, donde han pedido que este paso sirva de ejemplo para ciudades como Sevilla, Córdoba, Palma de Mallorca, Marbella o Mijas, “donde aún se sigue explotando a caballos y burritos bajo el sol y la lluvia”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
