Raquel Pérez se convierte en la primera mujer en presidir Rioja en sus 100 años de historia

Cien años han tenido que pasar para que la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja elija a la primera mujer presidenta. Es Raquel Pérez Cuevas, consejera delegada de Ontañón Familia y presidenta del Grupo Rioja, que agrupa al mayor número de bodegas en la denominación de origen más antigua de España, que se extiende por tres comunidades: La Rioja, País Vasco y Navarra.

“Soy mujer y tengo el honor de ser la primera en presidir el Consejo Regulador cuando se cumplen 100 años de esta denominación. Soy la primera, pero no seré la única, porque la presencia femenina en el sector es cada vez más importante”, ha asegurado tras tomar posesión del cargo ante las autoridades, los representes del sector y su propia familia. Pérez, ingeniera agrícola y enóloga, cuya vinculación con el mundo del vino le viene de cuna, ha logrado expandir la bodega familiar, a otras zonas como Ribera de Duero y Rueda, tras una trayectoria de más de 25 años.

Ahora asume la máxima responsabilidad de la denominación de origen más antigua de España, un negocio que factura más de 1.500 millones al año y cuyos caldos se venden por 136 países. Y lo hace en un momento de dificultades ―“nos azota una crisis muy profunda”, ha asegurado su predecesor en el cargo, Fernando Ezquerro―, como consecuencia de la caída del consumo de vino a escala mundial. Una circunstancia que hace que las ventas no se recuperen desde la pandemia en 2020 ―el pasado año crecieron un ligero 0,6% hasta alcanzar 240 millones de litros, más de 328 millones de botellas, según los datos de la DOCa Rioja―.

“No es un momento sencillo. No es un momento de vino y rosas”, ha incidido Pérez Cuevas, que ha puesto la mirada en la difícil coyuntura a la que también tuvieron que hacer frente los pioneros de esta denominación hace cien años. “Todo ello en un horizonte sombrío y sin saber muy bien en aquel entonces qué era Rioja, qué significaba y en lo que se iba a convertir”.

Para la nueva presidenta de la DOCa Rioja es innegociable la apuesta “radical” por la calidad. “Rioja siempre ha resistido por su calidad”, ha resaltado, y, por ello, se ha comprometido a trabajar por “alcanzar el equilibrio” en un momento en el que los viticultores mantienen su denuncia por la “escasa” rentabilidad, con unos precios que “no cubren los costes de producción”, y que hace poco más de un año hizo que salieran a la calle en las movilizaciones de los ‘chalecos amarillos’.

“No podemos perder de vista nuestra razón de ser, la de hacer la mejor denominación del mundo”, ha reiterado Pérez Cuevas en alusión a los cerca de 13.000 viticultores y cerca de 600 bodegas que conforman esta denominación, que aglutina a 144 municipios, con una población conjunta de alrededor de 340.000 habitantes, cerca de la mitad en Logroño (152.262 habitantes). Una forma de vida y un sustento económico fundamental para muchos pequeños pueblos de las tres comunidades autónomas.

Garantizar el relevo generacional, la sostenibilidad y el enoturismo –las visitas a las bodegas han establecido un nuevo récord en 2024 con más de 900.000 personas, según datos de la DOCa Rioja- son otros de los ejes estratégicos en este mandato para los próximos cuatro años. “Es nuestra responsabilidad que nuestros hijos, nuestros nietos y las demás generaciones que están por venir puedan disfrutar de vinos, viñedos y bodegas y que, como nosotros, pueden sentir el orgullo en cualquier parte del mundo donde estén”.

Pérez Cuevas ha apelado a la unidad para que “Rioja siga ocupando el lugar que se merece en el mundo del vino”. “Un modelo de éxito durante más de cien años que ha vencido las adversidades. Rioja está por encima de nosotros y a todos nos sobrevivirá”, ha concluido.

Por su parte, el presidente saliente, Fernando Ezquerro, ha animado “a mirar el futuro con optimismo” a pesar de la “gran inestabilidad internacional”. “Somos una de las grandes marcas de España en el exterior”, ha subrayado.