Las ministras de Sumar salen a las calles para pedir el fin del “genocidio en Gaza”

Todas las ministras de Sumar han participado este lunes en un acto denunciando “el genocidio en Gaza”, sus compañeros Ernest Urtasun y Pablo Bustinduy han fallado por motivos personales, alegan desde el partido. La vicepresidenta primera del Gobierno y titular de Trabajo, Yolanda Díaz, ha llamado en el acto a decir “basta ya” y ha interpelado a la vicepresidenta de la Comisión Europea, Kaja Kallas: “No tiene razón, no estamos ante indicios de vulneración de los derechos humanos. Estamos viviendo un genocidio en directo”. Al acto de protesta también han acudido personalidades reconocidas de la izquierda europea, como Ciarán Cuffe, copresidente del Partido Verde.

Cuando Díaz ha pedido que las bases militares estadounidenses en España no sean usadas para el movimiento de armas, unas personas han gritado: “¡Bases fuera!”. Todos los ponentes han pedido el embargo de equipos militares. Estrella Galán, que encabezó la lista de Sumar en las elecciones europeas de 2024, ha abierto el acto agradeciendo al público, “lleno de gente buena”. Ha manifestado que la violencia “ha alcanzado niveles insostenibles de crueldad” y ha denunciado el “silencio cómplice” de la UE con Israel. “La historia no solo juzgará a Netanyahu. La historia juzgará lo que no están haciendo las instituciones, la comunidad internacional y la UE”. También ha exigido el fin de todas las relaciones con Israel y la detención de Netanyahu, que se encuentra “protegido, impune y de pie”.

El evento se ha retrasado unos 20 minutos, muy poco después de que se conociera que los diputados de Més Compromís habían aprobado mayoritariamente salir de la coalición de Sumar en el Congreso de los Diputados y que la diputada Àgueda Micó pase al Grupo Mixto. El vaivén de unos abanicos de papel ha acompañado al acto. Prácticamente, todos los asistentes tenían uno. En una de sus caras, se podía leer “Palestina Libre”, mientras que la otra tenía impresa los motivos de una kufiya, el pañuelo tradicional de muchos pueblos de Oriente Próximo y ya un símbolo del activismo palestino. En los jardines del Templo de Debod, en Madrid, alrededor de un centenar de personas han escuchado a los ponentes. Muchos de ellos se sentaban alrededor del escenario con el atril, en una disposición asamblearia. Otros se encontraban en los alrededores, la mayoría sentados en el césped. La gente portaba carteles con el retrato del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, con la palabra “genocida” y pidiendo el fin de los ataques a la Franja de Gaza. Aunque no ha participado en el acto, la diputada de Sumar Tesh Sidi ha estado entre el público. Sidi ha regresado hace pocos días de Egipto, donde se manifestó en unas marchas multitudinarias en apoyo a Palestina.

Mientras hablaba Zarah Sultana, parlamentaria del Partido Laborista británico, una mujer con una careta con purpurina ha entrado en la zona del acto al grito de “viva, Israel”. Cuando los asistentes la han reprendido, ha corrido fuera del círculo y ha desplegado una bandera con la estrella de David y ha calificado a los gazatíes de “terroristas”.

Francesca Albanese, relatora especial de la ONU para Palestina, se ha dirigido en castellano a los asistentes para agradecer el “calor y la acogida” que siente cada vez que viene a España. Ha prometido que nunca olvidará a los ministros del Gobierno y parlamentarios españoles con los que se ha reunido y ha remarcado que se “siente especialmente agradecida” con el titular de Exteriores, José Manuel Albares. “Sin lugar a dudas, Israel ha cometido un genocidio”, ha continuado en inglés. Ha calificado las actuaciones del Ejecutivo de Netanyahu en los territorios ocupados como una “letanía de crímenes de guerra”. Ha culminado su intervención llamando a llevar a cabo más protestas y manifestaciones y a imponer “sanciones, sanciones y más sanciones”.

El acto ha congregado a 17 personalidades de la izquierda nacional y europea y activistas propalestinos. Entre los internacionales, destacan Ilan Pappé, historiador israelí que ha denunciado la represión de Israel sobre Palestina o Basel Adra, cineasta palestino que ganó el Oscar al mejor documental por el filme No Other Land, que trata la resistencia de una comunidad en la Cisjordania ocupada. El cineasta ha subido al estrado entre aplausos y ovaciones. Ha denunciado que “la limpieza étnica nunca ha parado” y ha pedido a los ciudadanos de la UE que no dejen de protestar y manifestarse hasta que se acabe la invasión.

La presencia de los altos cargos de la Unión Europea en apoyo a Palestina llega pocos días después de que la Comisión confirmara que Israel no está cumpliendo con sus obligaciones humanitarias en el conflicto con Gaza. El Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), dirigido por la alta representante de la Unión para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, constató en un documento el pasado viernes que el bloqueo en Gaza constituye un “castigo colectivo”, prohibido por el derecho humanitario internacional, y que podría considerarse que Israel ha hecho “uso del hambre como método de guerra”. La presión de la UE al Gobierno de Netanyahu ha alcanzado su punto más alto en décadas. Una mayoría de 17 de los 27 Estados miembros han suscrito revisar el acuerdo de colaboración comunitario con Israel, aduciendo que las relaciones entre las partes “se basarán en el respeto de los derechos humanos y los principios democráticos”, según apuntaron fuentes diplomáticas a este periódico.

Desde que comenzó la guerra en octubre de 2023, que ya se ha cobrado la vida de más de 55.000 gazatíes, las calles españolas se han llenado para pedir su final. La última protesta de este tipo en Madrid se celebró el pasado viernes, convocada por la plataforma Fin al comercio de armas con Israel y la Red solidaria contra la ocupación de Palestina y con la presencia de los altos cargos de Podemos. Los manifestantes cargaron contra “los 20 meses de genocidio” en Gaza y contra la connivencia del Gobierno con Israel.