Detenido en Alicante un exguerrillero colombiano que asesinó a civiles para hacerlos pasar por bajas en combate

El Zarco vuelve a estar en manos de la justicia, pero en España, no en su Colombia natal. Durante años, el exguerrillero Luis J. Castro Ramírez condujo a las unidades militares del Ejército colombiano hacia supuestos objetivos considerados enemigos del Estado. Otras veces, les mostraba la ubicación de combatientes ya fallecidos. En realidad, se trataba de campesinos disfrazados, a los que El Zarco, el apodo de Castro Ramírez, había reclutado en otros puntos del país. Les había prometido un trabajo que no existía. Y, en lugar de un empleo, encontraban la muerte: los asesinaban y el guerrillero los hacían pasar por caídos en combate. Eran falsos positivos, la tétrica especialidad del delincuente. Buscado por su país a través de Interpol, fue detenido este sábado en Benissa (Alicante), tras un dispositivo internacional organizado por la Policía Nacional. Colombia y España tramitan ya su extradición, señalan fuentes policiales.

Sobre Castro, uno de los criminales más buscados de Colombia, pesaba una Orden Internacional de Detención por diferentes delitos, como el de homicidio y pertenencia a organización criminal, por los que tiene pendiente una condena de 40 años de prisión en su país. Se le imputan las muertes de 14 jóvenes captados como falsos positivos, y además el asesinato de otras cuatro personas en 2007 y la entrega de otras seis al Ejército de Liberación Nacional (ELN) —la última guerrilla activa en Colombia, considerada terrorista por su país, EE UU y la UE—, que luego fueron ejecutados.

Detenido y liberado

Esta es la segunda vez que se localiza y detiene al criminal en España. La primera vez fue en 2018. La Audiencia Nacional acordó su entrega al país sudamericano, pero el trámite de la extradición se demoró y las autoridades españolas terminaron liberándolo tras agotarse los plazos.

Este sábado, el mismo día de la detención, el presidente colombiano, Iván Duque, dio a conocer la noticia de que El Zarco había sido apresado. La colaboración entre la Policía española y la colombiana, a través de la Interpol, puso en marcha la búsqueda del fugitivo, del que no existía huella alguna de su estancia en España tras su puesta en libertad, según fuentes de la investigación.

La nueva búsqueda comenzó en A Coruña, porque los investigadores tenían constancia de que algunos familiares del Zarco residían en la ciudad gallega. El rastro, sin embargo, los llevó a la otra punta del país, a Benissa, un municipio de 13.000 habitantes del litoral norte de la provincia de Alicante, próximo a grandes puntos turísticos como Calpe o Xàbia. Allí, según desvelan fuentes policiales, Castro fue localizado en casa de unos familiares, con quienes, al parecer, estaba pasando una temporada.

El operativo policial se desplegó en torno a la vivienda y, el pasado sábado, El Zarco salió finalmente al exterior. Inmediatamente fue detenido, conducido a la Comisaría de Alicante y puesto a disposición judicial. La Audiencia Nacional será la encargada de tramitar su extradición y entrega a las autoridades colombianas.