Condenan a Matthias Khün, novio de Normal Duval, por obras ilegales en su islote

El empresario inmobiliario Matthias Khün, novio de Norma Duval, ha sido condenado a seis meses de prisión y una multa de 5.580 euros por un delito contra la ordenación del territorio por realizar obras sin autorización en su islote privado de Tagomago, en Ibiza. El juzgado de lo penal número dos de Ibiza también le ha condenado a una pena de inhabilitación de dos años para ejercer la profesión u oficio de promotor inmobiliario y le ha absuelto de un delito contra el medio ambiente que le imputaba la fiscalía.

La sentencia considera probado que las obras que se llevaron a cabo en la isla fueron ejecutadas sin autorización. El empresario encargó la pavimentación de las zonas adyacentes a la vivienda principal de Tagomago en las que previamente solo había campo. Ordenó construir caminos de piedra, escaleras, una terraza y una caseta de piedra y cemento en la zona del puerto, donde también ubicó una pasarela de madera. Durante el juicio alegó que contaba con el silencio administrativo del Ayuntamiento de Santa Eulalia a su petición de licencia de obras y por lo tanto esta eran legales.

Sin embargo, el dictamen de la jueza señala que el silencio administrativo del Consistorio a la solicitud de licencia de obra menor “no podía suplir al informe que la Consejería de Medio Ambiente debía emitir según establece la Ley para la Conservación de los Espacios de Relevancia Ambiental”. La magistrada subraya que la solicitud para ejecutar las obras se refería únicamente “a trabajos en el interior de la vivienda” y recuerda que era preciso solicitar autorización “independientemente de que hubiere podido o no concederse”.

El islote de Tagomago está situado frente a la costa de Ibiza. Se trata de un enclave catalogado como Área Natural de Especial Interés del más alto nivel de protección y forma parte de la Red Natura 2000. La fiscalía sostenía que las obras llevadas a cabo por Khün y ejecutadas por el constructor Guido Hecker provocaron movimientos de tierras y la extracción de la cubierta vegetal y del suelo de la zona. Sin embargo, la jueza aprecia la tesis de los peritos que declararon durante el plenario al considerar que la actuación de los acusados fue de carácter local y afectó únicamente al espacio donde se realizaron las obras, descartando que los trabajos pudieran comprometer “la conservación de poblaciones de especial interés” y absolviendo a los dos acusados de un delito contra el medio ambiente.

El constructor Guido Hecker también se sentó en el banquillo acusado de los mismos delitos que la pareja de Norma Duval. También ha sido condenado a seis meses de prisión y al pago de una multa de similar cuantía que Khün, además de una pena de inhabilitación de dos años como constructor. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante la Audiencia Provinical de Palma en un plazo de diez días.