Monstruo Espagueti nos comenta sus viñetas: Tentaciones en la SER
La ilustradora Anastasia Bengoechea, que se hizo viral con una pintada en un WC (“a todas las chicas que he conocido en los baños”), estuvo en nuestro programa de radio hablando de feminismo y borracheras

La artista Anastasia Bengoechea es impredecible. Lo mismo te llama al móvil por error (“debió marcar tu número mi culo”) que pinta el suelo y destroza lámparas mientras realiza una pancarta para una firma de moda. Impredecible en el mejor de los sentidos, porque parece seguir en cada instante la máxima de “para lo que me queda en el convento, me cago dentro” y eso hace que jamás cuente hasta tres antes de hablar. Por todo ello y porque nos encanta su obra, invitamos a esta exitosa ilustradora a nuestro programa de Tentaciones en la SER y le pedimos que nos explicase algunas de las frases que acompañan a sus dibujos.
Tal cual, es una reflexión de váter, es una reflexión en la que yo estaba pedo en un bar del Raval y nada, tenía un rotulador y lo dibujé en la pared, como hago mucho. Me encanta el vandalismo. Le hice una foto y empezó a petarlo muchísimo. A los dos días era el Día de la Mujer Trabajadora, por lo que era el momento ideal. Una chica añadió un texto y aquello se hizo viral. Para que luego digan que el alcohol es malo…
“Esta noche mi gran chute de adrenalina es un bote de Nutella sentada en la cocina.”
Fue en un momento en el que estaba yo, típica noche de sábado que ves las stories de Instagram y está todo el mundo de fiesta, pasándoselo bien… Y nada, yo estaba en mi cocina comiendo un bote de Nutella. Me salió ese poema, inspiración del azúcar que me subió, yo creo. La Nutella tiene un toquecito como más nuez, almendra… Es que todo mata, joder. Si sales bebes alcohol, te drogas… Si te quedas en casa, aceite de palma. Pues nada.
Hoy en día, como todas las relaciones son “ay, no sé, “ay, sí lo sé”, y todo el mundo está así. Bueno, al menos en mi entorno. No sé si es porque mi entorno es más artístico que nadie se aclara y todo el mundo está con esas relaciones que estás y no estás. Es mejor intentar no caer en bucles de reciclar los ex-novios, porque no vale para mucho. Si a la primera ya no…

“Hey chicas, no podéis tener ningún pelo en el bigote, mentón, muslo, ingle, axila, pubis pierna, brazos. Es decir, todo fuera menos en la cabeza y en las cejas, con el resto haced lo que queráis porque sois libres.”
No me acuerdo qué estaba haciendo, pero era verano… Hace dos veranos creo que era cuando hice esto y, nada, estaba hasta el coño de depilarme. Ahora me sale un poco más suavecito porque me he hecho el láser, pero es que lo tenía rollo ‘negro del congo’ para depilarme. Esto ha sonado mal, ¿no? Pero es que, en serio, a veces he deseado ser un hombre para no depilarme. Ahora está más aceptado pero es que es una lacra, ser mujer es una condena. ¡Vete tú a trabajar con el sobaco negro!
“Grandes misterios: si siempre uso la misma contraseña para todo por qué nunca la pongo bien”
Ya, es un misterio de Cuarto Milenio. Siempre usas la misma, esto es verídico, mío y autobiográfico. Siempre uso la misma. Sin embargo, cuando la pongo, no es esa.

‘Estás fatal’ (su segundo libro).
Es un recopilatorio de viñetas que he ido haciendo. El tipo de humor que yo toco generalmente es un humor en el que uno se autolamenta, es un recurso que utilizo. El “qué mal me va todo” y todo eso.
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