Imprescindibles

Después de muchos años intentando esclarecer los hechos del fusilamiento de nuestro abuelo y bisabuelo Mariano Espiga, gracias a la inestimable ayuda de Telmo Comesaña y de la Asociación Viguesa por la Memoria Histórica del 36, hemos conocido que fue fusilado el 16 de marzo de 1939 a los 33 años. Fue en O Castro de Vigo, y le enterraron en el cementerio de Pereiró. En el acta de defunción figura como causa de su muerte “hemorragia interna” (obviamente producida por el fusilamiento). Fue un asesinato perpetrado tras un juicio sumarísimo sin ninguna garantía democrática; había sido acusado de muchos delitos que Mariano Espiga negó. Sí se declaró “culpable” de pertenecer a la CNT y de defender un Gobierno democráticamente elegido. Este escrito es para agradecer a personas imprescindibles como Telmo y a la asociación a la que pertenece, hacen un trabajo inestimable. También para reivindicar la memoria de nuestro abuelo y bisabuelo. Lástima que la mayoría de los políticos no estén a la altura y se siga intentando que olvidemos nuestra historia.— Amparo Álvarez Auñón.