¿Seguridad, o ansia recaudatoria?

Leo que nuestros agudos gobernantes van a proveer más vehículos con radar, motos, helicópteros y coches para vigilar las carreteras “por nuestra seguridad” (cuántos desvelos para el bienestar de los ciudadanos). También se va a controlar desde el aire, incluso con satélites, a quien haya construido algo de manera irregular, entiéndase: “Sin pasar por caja”. Pero a nadie se le ocurre lo más sencillo, vigilar y denunciar el pésimo estado de los viales; carreteras llenas de baches; puntos negros; señalización obsoleta, deteriorada o inexistente; guardarraíles asesinos, etcétera.

¡Con lo fácil que sería que las diversas fuerzas de seguridad, que pagamos con nuestros impuestos, vigilasen solo un poquito el estado y mantenimiento de las vías! No les harían falta ni helicópteros, y sin duda eso redundaría en una mejora de la seguridad. No lo entiendo, o tal vez sí, creo que lo voy empezando a entender, tal vez no sean tan sinceros como yo pensaba.— Mariano Blanco Gema. San Fernando de Henares (Madrid).