Fallece Alex Calderwood, promotor de la idea de hotel ‘boutique’

Cuando en el mundo de la empresa se habla de Seattle, los nombres que surgen son evidentes: Bill Gates, por Microsoft, y Howard Schultz, por Starbucks. La lista es mucho más larga e incluye, entre otros, a Alex Calderwood. El cofundador de Ace Hotels, la cadena de hoteles boutique, murió el pasado jueves cuando se encontraba en Londres. Tenía 47 años. Las causas de su muerte todavía no se han hecho públicas.

Calderwood creó la sociedad con otros dos amigos en 1999. Lo hicieron reconvirtiendo un albergue del Salvation Army en el barrio de Belltown, que decoraron con obras de arte de Shepard Fairey, el mismo autor del póster tricolor de Barack Obama, y muebles antiguos. De ahí llevó el modelo a Portland, Nueva York, Palm Springs y hace dos meses a Londres.

Él mismo denominaba a sus hoteles, a los que dotaba de una peculiar decoración, como “proyectos artísticos”. El salto del Atlántico fue un hito en la carrera de Calderwood. Su muerte se produce en pleno proceso de expansión de la cadena, con próximas aperturas previstas en Los Ángeles y Panamá City. Como indicaba Chip Conley, fundador de los hoteles Joie de Vivre, “era un soñador”.

El empresario se crió en los suburbios de Seattle. En lugar de ir a la universidad, empezó a trabajar en una tienda de ropa local. Los que trabajaron con él comentan que jugaba con maestría con los materiales que la gente desechaba, de tal manera que parecían nuevos. Sabía crear espacios y disfrutaba haciéndolo. Siete años antes de hacerse hotelero fundó las barberías Rudy’s.

El empresario era la imagen de la propia cadena. Pese a ser considerado uno de los gurús de la industria, y de que sus hoteles son frecuentados por jóvenes adinerados, en su entorno comentaban que era una persona humilde, natural y profunda. Es conocido que en el pasado tuvo problemas con el alcohol y las drogas, como él mismo reconoció en una entrevista hace dos años.