Un jefe de bomberos dice que fue destituido tras el fuego de Horta por "imagen"

Manel Bosch fue destituido como jefe de operaciones de los Bomberos en octubre, tres meses después del incendio de Horta de Sant Joan (Tarragona) que acabó con la vida de cinco bomberos de élite de los Graf. El Departamento de Interior siempre había negado que el cese tuviera relación con la gestión del incendio, que califica de correcta. La sospecha, sin embargo, siempre ha estado presente y hoy, Bosch la ha hecho más evidente. Según ha explicado en el Parlament, sus superiores justificaron la destitución para lograr un "cambio de imagen" de los Bomberos.

En su comparecencia en la comisión de investigación sobre el incendio de Horta, Bosch se mostró "dolido" por esas explicaciones e insinuó que se trataba de una destitución encubierta. "Estamos acostumbrados a que haya cambios, demasiados quizás, pero seguimos trabajando allí donde nos vuelven a ubicar". Bosch ha elogiado al nuevo jefe de bomberos, Joan Rovira, que también sustituyó por las mismas fechas al entonces máximo responsable, Antoni Rifà.

Bosch ha lamentado, en sus declaraciones, que los bomberos se hayan tenido que "desnudar emocionalmente" para analizar lo que ocurrió durante el incendio del pasado 21 de julio, en el que cinco bomberos de los Graf de Lleida perdieron la vida.

El responsable de Emergencias Médicas que trabajó durante el incendio, Miquel Vidal, ha asegurado que el 30% de los bomberos y familiares de las víctimas sufren ahora, con la comisión, una "segunda victimización" por el trato de los medios de comunicación y la politización del caso. La viuda de uno de los fallecidos, Susana Puscas, asegura que la difusión de las grabaciones y los vídeos de los momentos más dramáticos le ha afectado psicológicamente y asegura que le resulta muy difícil dormir, informa Ferran Balsells.