Detenidos los dos presos acusados del asesinato de un joven y la violación de su novia

Francisco Javier Picatoste y Manuel Brito estaban cercados por tres anillos de agentes policiales antes de su detención, según han explicado los responsables de la Guardia Civil y de los Mossos d'Esquadra.

Según el teniente coronel de la Guardia Civil Miguel Gómez Alarcón, la detención se ha producido "con absoluta limpieza y sin disparar un sólo tiro", de manera que han sido sorprendidos y detenidos rápidamente.

Brito, que cumplía una condena de 30 años por homicidio, se escapó el pasado 14 de octubre del hospital Arnau de Lérida, al que fue trasladado para ser atendido de una lesión que él mismo se había causado en la cárcel.

El homicida recibió la ayuda en el momento de la fuga de Picatoste, que no había regresado a la prisión de Lérida tras un permiso y que disparó a bocajarro a los dos mossos que custodiaban a Brito.

Los dos agentes resultaron heridos de gravedad y uno de ellos podría quedar tetrapléjico a consecuencia de los disparos que recibió por la espalda.

La policía sostiene que tras estos hechos los detenidos se escondieron en las montañas de Lérida durante una semana para posteriormente huir a la zona metropolitana de Barcelona.

120 agentes

El jefe de Investigación de los Mossos d'Esquadra, Joaquim Bayarri, ha precisado que había noticia de que esta noche los detenidos acudirían a una cita y eso ha facilitado su detención. Así, agentes de la Guardia Civil y de la policía autonómica -unos 120 en total- habían desplegado tres anillos en torno a una zona del kilómetro seis de la carretera de la Arrabassada, que enlaza Barcelona y Sant Cugat a través del Tibidabo.

Ha sido en esta zona, en un claro de la sierra de Collserola situado junto a una caseta, donde han sido detenidos Manuel Brito y Francisco Javier Picatoste minutos antes de las 22.00 horas.

A ambos se les ha intervenido un revólver y una pistola automática que sustrajeron a uno de los dos Mossos d'Esquadra a los que dispararon en su fuga.

Respecto al móvil del crimen perpetrado esta semana en Cerdanyola por los detenidos, Bayarri ha explicado que los fugados querían conseguir un coche, y presumiblemente dispararon sobre el conductor ante la resistencia de éste. Los detenidos están acusados de asesinar la noche del martes pasado a un joven y de violar a su novia.

Fuentes de los Mossos d'Esquadra han asegurado que la operación no se dará por cerrada hasta que se detenga a una tercera persona que habría ayudado a los dos presos a sobrevivir 20 días a la intemperie en los bosques de Collserola.