Las eléctricas prevén operar con el recargo antiapagón en la factura de la luz durante casi todo 2026

Las grandes compañías eléctricas ya están planificando el año 2026. Y de sus decisiones ya se pueden sacar algunas conclusiones. Según aseguran fuentes empresariales conocedoras, las previsiones que manejan para el ejercicio que entra contemplan que el sobrecoste que pagan los consumidores en la factura de la luz para evitar un apagón como el del 28 de abril se mantenga aún durante muchos meses. Incluso hay fuentes del sector que prevén que el denominado recargo antiapagón pueda prolongarse todo 2026.

Estas previsiones son corroboradas por fuentes al tanto de la operativa de los ciclos combinados de gas, las plantas que dan estabilidad al sistema. Estas centrales producen electricidad a partir de gas natural. Y los dueños de las mismas pronostican que su actividad, que se disparó desde la desconexión masiva de la pasada primavera en toda la península Ibérica, pueda ser en 2026 similar a la de este año.

Una fuente próxima a los operadores señala que su previsión es que el consumo de gas para los ciclos combinados sea igual o algo inferior. Otra de las fuentes consultadas, también conocedora de la situación, detalla que habrá una cierta disminución, compatible con que se mantengan los aumentos de costes que conlleva la operación reforzada. “Habrá una cierta disminución tanto de la producción como lógicamente del consumo de gas por efecto de la nueva capacidad renovable que entra en el sistema y por la moderación de REE en su utilización”, subraya. Su previsión es que la producción eléctrica de ciclos combinados pase de 44,3 teravatios por hora (TWh) a 38,4 TWh. En cuanto a consumo de gas en estas plantas, el pronóstico es que pase de 96,2 TWh a 80,0 TWh.

Estos guarismos son coherentes con las cifras que publica Enagás, gestor el sistema gasista. La previsión de demanda de gas para generación eléctrica para 2026 es de 82 TWh, algo mayor que la que se hizo para 2025 (antes del apagón) pero inferior a la demanda real (entre 95 y 100 TWh). Para ver la diferencia entre 2026 y 2024, el último año sin operación reforzada por el apagón, la subida del consumo de gas en centrales eléctricas será de casi un 10%, lo que revela que se prevé que la operación reforzada continuará aún por muchos meses y, por lo tanto, los consumidores todavía seguirán sufriendo el sobrecoste.

Desde el Ministerio para la Transición Ecológica evitan hacer previsiones y se remiten a Red Eléctrica, ya que es el operador del sistema quien aplica la operación reforzada desde el 29 de abril de 2025. Fuentes de REE se limitan a señalar que “la previsión del operador de sistema es reducir progresivamente la llamada operación reforzada en los próximos meses, a medida que entre en vigor el nuevo procedimiento de operación 7.4 y que se acredite su efectivo cumplimiento e impacto”.

El procedimiento de operación 7.4 actualizado fue aprobado por la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) el pasado mes de junio. Su objetivo es habilitar a centrales renovables para que hagan control dinámico de tensión a un menor coste. Esto evitaría que entraran tantos ciclos combinados de gas para estabilizar el sistema y de esa manera ir rebajando el coste de las medidas en el recibo de los consumidores.

Sin embargo, varias fuentes empresariales aseguran a este diario que el proceso de homologación de plantas para que puedan entrar en el procedimiento de operación 7.4 están yendo mucho más lento de lo que se preveía en un inicio. Esa es precisamente la razón que les está llevando a prever que las plantas de ciclo combinado de gas seguirán siendo casi tan necesarias como este año para dar estabilidad al sistema.

La cuestión no es baladí, ya que la operación reforzada que aplica Red Eléctrica está suponiendo un encarecimiento del recibo de todos los consumidores. El mayor uso de los ciclos combinados supone un mayor coste de los servicios de ajuste del sistema. En semanas posteriores al apagón, hubo comercializadoras que incrementaron el recibo a sus clientes alrededor del 7%, alegando precisamente las mayores cargas que soportan desde el 28 abril. La CNMC prohibió actualizar tarifas, pero eso no aplica a las renovaciones de contratos, donde sí se están trasladando estos incrementos. Otra comercializadora independiente confirmaba recientemente el extracoste del 7% que trasladan a sus consumidores en las renovaciones anuales de contratos.

Iberdrola y Endesa, las dos mayores comercializadoras de luz en España, aseguraban en su última presentación de resultados que esta operación reforzada les había supuesto un impacto en su negocio de comercialización de 360 millones de euros entre ambas, que suman alrededor de 20 millones de clientes. Las dos eléctricas aseguraron que para 2026, ya habrían traspasado el coste al 100% a sus usuarios.

En el caso de los casi nueve millones de clientes de tarifa regulada (PVPC), esa operación reforzada se paga desde el mismo día 29 de abril. Red Eléctrica resta peso a este coste y señala que “de mayo a noviembre, ha supuesto un coste de 486 millones de euros”. Según sus cálculos, “la operación reforzada ha tenido un coste en noviembre de 4 céntimos al día (usuario sujeto a PVPC con consumo medio mensual de 300 KWh)”. No obstante, cuando más se nota este coste es en momentos de elevada generación y baja demanda, que es cuando más se desestabiliza el sistema. Esto coincide con los meses de abril y octubre, tal y como se ha podido constatar en esos periodos de este mismo 2025.

Todo esto lleva a concluir que más de un año después de que se produjera el apagón del 28 de abril, será necesario mantener medidas extraordinarias para la estabilidad del sistema que tienen un impacto en el recibo de la luz. Ocho meses después del histórico incidente, se siguen sin conocer los responsables del apagón, a los que se espera que se reclamen miles de millones de euros por los daños ocasionados ese día.