La búsqueda de una vacuna dispara en Bolsa a las farmacéuticas

La crisis del coronavirus ha contagiado a los mercados y amenaza con llevarse por delante buena parte de la economía. Pero en este caso, el sector farmacéutico tiene ante sí la oportunidad de rentabilizar el problema. Cada movimiento en busca de una vacuna o mejoras en tratamientos y pruebas sobre el virus suponen oscilaciones muy bruscas en las cotizaciones. Por el momento, la anglofrancesa Novacyt y la norteamericana Aytu BioScience se llevan la palma: la primera se ha apreciado en Bolsa desde inicio de año más de un 600%. Y la segunda, se ha disparado esta semana y ha duplicado su valor en unos días muy convulsos en Wall Street.

El incremento de Novacyt se debe al test molecular que anunció la compañía, que sirve para diagnosticar el virus. Su acción acabó el año pasado con un valor de 0,169 euros y este viernes cerró en 1,29 euros. Un mundo entre una y otra cotización.

Aytu BioScience sufrió al inicio del año. En enero perdió un 25% de su valor, misma cifra que en febrero. Sin embargo, en lo que va de marzo, se ha apreciado más de un 80%. El crecimiento experimentado se debe al acuerdo alcanzado en Estados Unidos para ser el distribuidor de la prueba rápida de la Covid-19, lo que la ha impulsado en los mercados en las últimas semanas.

Las firmas españolas han aprovechado solo algunas sesiones para experimentar grandes subidas. Pero la falta de resultados por el momento las deja a casi todas en terreno negativo en lo que va de año. La que menos sufre el embate de los mercados es PharmaMar (-6% en 2020), que anunció este viernes que su tratamiento contra el coronavirus está listo para ser probado en pacientes infectados, lo que la catapultó en Bolsa un 33%.