Rigau recorta el 25% la aportación a las guarderías públicas, pero no toca las privadas

Las tijeras vuelven a rondar sobre las guarderías y las escuelas de música. El Departamento de Educación prevé un recorte del 25% de las partidas destinadas al fomento y el funcionamiento de estos centros, que en total ascienden a 82 millones. Según los presupuestos de 2012 que la consejera de Educación, Irene Rigau, defenderá hoy en el Parlament, las guarderías municipales recibirán 48,6 millones de euros para su funcionamiento (el 20% menos que el año pasado), las escuelas de música tienen adjudicados 21 millones (un 29% menos), y los centros de artes plásticas, 4,5 millones (el 10% menos). Por el contrario, la aportación a guarderías privadas no se mueve ni un céntimo y se mantiene en 8,87 millones.

Los jardines de infancia y las escuelas de arte están siendo una de las cruces del Gobierno de CiU. En verano, con solo seis meses al frente de la Generalitat, Educación recortó su subvención el 11% a las plazas de guarderías y el 23% a las escuelas de música. El anuncio despertó un gran revuelo en los municipios, ya que el recorte tuvo que ser asumido por los Ayuntamientos o por las familias a través de la subida de cuotas.

Este nuevo tijeretazo se prevé que repercutirá, en la mayoría de casos, directamente en las familias. La consejera Irene Rigau ya advertía hace un par de semanas de la posibilidad de aplicar un nuevo recorte en las subvenciones a las guarderías, a lo que los Ayuntamientos reaccionaron enérgicamente. Las entidades municipalistas han advertido en más de una ocasión de la situación límite en que se encuentran las finanzas locales y de que no podrían cargar con ese sobrecoste. "Las familias serán las perjudicadas", alertaban.

Pero además de pagar menos, la Generalitat lo hace tarde. El Gobierno catalán todavía no ha abonado los 112 millones que debe a los municipios en concepto de subvenciones a jardines de infancia y escuelas de música correspondientes al curso 2010-11. El pago se debía haber hecho antes de finales de año. Los 112 millones forman parte de la deuda total de 753 millones que la Generalitat tiene con los Ayuntamientos y que ayer la vicepresidenta, Joana Ortega, aseguró que pagarán cuando puedan.