La UE quiere que la gran banca cierre los negocios de riesgo

La Unión Europea aboga por aumentar la capacidad de los reguladores para mejorar el control de las cuentas de los bancos. Pero, en el caso de las entidades demasiado grandes para caer porque pondrían en peligro al conjunto del sistema, también quiere que puedan limitar sus actividades e, incluso, que no puedan colocar productos financieros que conlleven riesgos excesivos.

Esta es la propuesta del Ejecutivo comunitario para reformar el sistema financiero y evitar que el contribuyente tenga que pagar los rescates en futuras crisis, según un borrador al que ha tenido acceso Bloomberg. En él, Bruselas también aboga por realizar un seguimiento de las inversiones de las entidades con el objetivo de forzarles a restringir su exposición a determinados sectores muy cíclicos, como podría ser el inmobiliario en España. En caso de que, pese a la mayor vigilancia, acaben necesitando las ayudas públicas para sobrevivir, los reguladores estatales podrán obligarles a cambiar "sus estructuras legales u operativas".

Definir cuáles son las entidades sistémicas y sus requisitos son el siguiente paso a dar en la reforma financiera internacional. En la mente de los presentes en el Foro de Estabilidad Financiera (FSB), el órgano encargado de definir estas cuestiones, está no repetir lo ocurrido con Lehman, cuya quiebra en otoño de 2008 dejó al sistema al borde del colapso.

Aunque las negociaciones de la propuesta de Bruselas continuarán de aquí a final de año, se da por seguro que las entidades sistémicas tendrán exigencias más estrictas de capital y estarán sometidas a una vigilancia más rigurosa. En España, el Santander y el BBVA serán consideradas entidades demasiado grandes para caer, en cálculos del Gobierno.