La juez Alaya se opone a ser apartada del 'caso Mercasevilla'

La juez Mercedes Alaya ha elevado a la Audiencia un escrito en el que se opone a la recusación planteada por una de las defensas, a la que se sumó la fiscalía, en la causa que investiga por delito societario del caso Mercasevilla. El esposo de la juez, Jorge Castro, fue auditor de la empresa durante siete años hasta junio de 2002 y, según el ministerio público, esto afectaría la imparcialidad de la juez.

La argumentación de la magistrada es prolija y tiene 39 páginas. En ellas, según fuentes del caso, Alaya aclara por qué considera que su marido Jorge Castro no trabajó directamente para Mercasevilla, sino para KPMG, la consultora que realizó la auditoría de la empresa municipal. Tres meses después, el ex director y principal imputado en el caso, Fernando Mellet, accedió al cargo.

Tras la apertura de la pieza separada de recusación, la juez Alaya y el PP se han opuesto a que la magistrada sea apartada del caso. Mientras, la defensa de la ex directiva Pilar Giraldo -que promovió el incidente- así como la de los ex directivos Mellet y Daniel Ponce, la empresa Mercasevilla y la Fundación Mercasevilla, piden la recusación de la magistrada. Por su parte, el PSOE, pese a su repetido enfrentamiento con la juez, no ve razones para que se aparte de la causa.

Tres días de estudio

La juez Auxiliadora Echevarría de la Sección Primera de la Audiencia Provincial es la instructora que aceptará o rechazará las pruebas propuestas por las partes, entre ellas la declaración de Castro. Echevarría recogió ayer las 250 páginas que componen la pieza de recusación. Después de la posible admisión de las pruebas, la juez estudiará el incidente durante tres días y a continuación lo elevará a otra sección de la Audiencia, que finalmente decidirá si existen suficientes razones para que la juez Alaya se abstenga para preservar la imparcialidad de la justicia. Esta decisión será irrecurrible.

En la Audiencia de Sevilla se han presentado 12 incidentes de recusación en los últimos dos años. El más sonado afectó al caso Marta y aún lo estudia el Tribunal Superior de Justicia (TSJA). En el incidente que afecta ahora a Alaya, la fiscalía considera "innegable" la relación de Castro con la investigación judicial que lleva su esposa.