Belgrado sufre la ira de los 'ultras' serbios

Las calles de Belgrado vivieron ayer escenas de extrema violencia cuando unos 6.000 ultras y cabezas rapadas se enfrentaron cuerpo a cuerpo y hasta con armas de fuego a los 5.500 policías antidisturbios que protegían al millar de participantes en una marcha gay. Al menos 140 personas resultaron heridas, en su mayoría policías, y la cifra de detenidos superó los dos centenares. "La cacería ha comenzado. Muerte a los maricones", coreaban los grupos de homófobos. Las autoridades serbias ya habían advertido de la posibilidad de esos ataques. El Gobierno los atribuyó a organizaciones nacionalistas radicales.