Exteriores pide a los activistas respeto a la "legislación vigente" en el Sáhara

El Gobierno español trasladó ayer a Marruecos su "preocupación" por la agresión en El Aaiún contra activistas prosaharauis españoles . El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Juan Pablo de Laiglesia, se dirigió a las autoridades marroquíes para reclamar "información y explicaciones adecuadas sobre las circunstancias" que rodearon las detenciones.

En una nota oficial de Exteriores se asegura que De Laiglesia telefoneó a su homólogo marroquí, Yusef Amrani, para "pedir que los ciudadanos españoles puedan trasladarse a El Aaiún con plenas garantías". La nota concluye con este texto: "El Gobierno español, comprometido con la defensa de los derechos de sus ciudadanos en el extranjero, reitera la necesidad de respetar la legislación vigente, y confía en que estos incidentes no vuelvan a producirse". Esto es, Exteriores pide a los cooperantes respeto a la legalidad vigente en el Sáhara, la marroquí, que impide manifestaciones prosaharauis.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, evitó ayer pronunciarse sobre las denuncias de malos tratos de la policía marroquí. Preguntado en Shanghai (China) , alegó que el Ejecutivo ya había expresado su "preocupación" por lo sucedido.

En todo caso, la petición de explicaciones supone, en términos diplomáticos, una forma de protesta, aunque sea de tono menor, y es la misma fórmula que se utilizó con el Gobierno de Marruecos a raíz de los supuestos malos tratos a ciudadanos suyos por parte de la policía española en la frontera de Melilla.

Zapatero quiso dejar claro, no obstante, que ni lo sucedido en El Aaiún ni los incidentes en la ciudad autónoma le harán cambiar su actitud hacia Rabat. "Puede que algunos se empeñen, pero es un principio esencial de la política exterior del Gobierno que presido mantener una buena relación con un país vecino como Marruecos, con el que compartimos muchos intereses y temas esenciales de estabilidad, seguridad y también económicos que están juego", advirtió. "A cada situación de dificultad le ponemos la dosis adecuada de diplomacia firme, pero diplomacia inteligente y sensata, y el Gobierno no va a caminar por otro derrotero", agregó.

El PP aprovechó ayer la polémica para incrementar la presión sobre el Gobierno. Soraya Sáenz de Santamaría, la portavoz del PP, exigió "firmeza" con Marruecos y anunció que su partido pedirá la comparecencia del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, para explicar qué está haciendo el Gobierno para defender a ciudadanos españoles, informa Carlos E. Cué.

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