¿Quién da más por Zachodni?

El banco polaco Zachodni ha contratado hace poco a Gérard Depardieu para una campaña publicitaria destinada a impulsar su base de depósitos. Pero BNP Paribas no puede contar con que el campechano actor francés y la tradicional francofilia de Polonia sirvan para ayudarle a proteger a Zachodni de su actual propietario, Allied Irish Banks.

El tercer banco más grande de Polonia es el foco de la subasta más reñida del verano, en la que los dos bancos más fuertes del continente europeo, BNP y Banco Santander, compiten con la entidad crediticia de control estatal PKO por el premio. La italiana Intesa SanPaolo se ha retirado hace poco de la puja, según la información aparecida en los medios.

Zachodni es un banco fuerte, que opera en una de las economías europeas que mejor se está comportando: Polonia es uno de los pocos países que no se hundieron en la recesión en 2009 y su crecimiento superará el 3% este año.

Dejando aparte la recién adquirida sobriedad del sector financiero, el principal factor que evita que la subasta se descontrole es el hecho de que AIB está desesperado por vender. La atribulada entidad crediticia irlandesa debe reunir 7.400 millones de euros de capital nuevo antes de finales de año para satisfacer los deseos del regulador. Si no lo hace, corre el riesgo de que el Estado asuma su control.

La participación del 70% que AIB posee en Zachodni vale unos 2.300 millones de euros según los precios actuales del mercado. Las autoridades polacas, preocupadas porque los agentes extranjeros ya representan el 70% del sector bancario del país, apoyan a PKO. Aunque la combinación de dos bancos polacos generaría más sinergias, puede que PKO se muestre tacaño. Tanto Santander como BNP deberían ser capaces de ofrecer una prima superior al actual precio del mercado, aunque es posible que tengan que ampliar la oferta a los accionistas minoritarios también.

BNP posee una pequeña entidad crediticia polaca que encontró entre los activos de Fortis, el banco belga que compró el año pasado, la cual, por lo visto, quiere fusionarse con Zachodni para crear un vehículo que permita una posible expansión por Europa del Este.

Por otra parte, es posible que el Santander resulte más atractivo para AIB: además de en Zachodni, está interesado en activos estadounidenses y británicos más pequeños que también vende el banco irlandés. A pesar de la vigilancia de las autoridades polacas, hay todavía una pequeña esperanza de que el resultado dependa de los respectivos méritos de las pujas.