Los cooperantes españoles, obligados a encerrarse en casa

Todos quietos. Es la recomendación que la Embajada española en Mauritania ha hecho a los españoles residentes en el país, la mayoría cooperantes y empleados del sector de la pesca. El censo a 1 de julio era de 245 españoles. En estos momentos hay 25 ONG españolas presentes en Mauritania, 10 de ellas catalanas, como Barcelona Acció Solidària, a la que pertenecen los tres secuestrados. En total, son 45 cooperantes españoles y otros 30 de terceros países que trabajan en proyectos de ONG españolas, según los datos del Ministerio de Asuntos Exteriores. Ayer, como medida de precaución, todos fueron informados de que por seguridad debían permanecer, al menos durante 24 horas, en sus casas.

Sébastien Benotti, jefe de la delegación de la ONG española Asamblea de Cooperación por la paz en Mauritania, llegó a Nuakchot el pasado agosto y asegura que hasta ahora no había tenido sensación de peligro. "Hemos pasado muchísimas veces por la carretera en la que se produjo el secuestro, es un sitio muy frecuentado. Cuando salimos en alguna misión, lo hacemos sin escolta, acompañados por chóferes que suelen conocer muy bien la zona y no nos hemos llevado ningún susto", asegura. "Ahora nos han pedido que no salgamos de casa en 24 horas".

La delegación de esta ONG llegó a Mauritania justo después de que un terrorista suicida se inmolara frente a la Embajada de Francia. "Entonces nos pidieron que tomáramos algunas medidas de seguridad como informar siempre a la Embajada de nuestros recorridos, no salir nunca en un solo coche, no ir nunca a las zonas más peligrosas, sobre todo en el norte y este del país... Siempre nos advirtieron de la amenaza del terrorismo y de que si eres occidental eres víctima potencial de estos grupos, pero en el día a día, en la calle, no notamos un clima de hostilidad", explica Benotti.

Siguiendo las directrices de la Embajada española en Mauritania, también los cinco cooperantes de Médicos del Mundo se han quedado en casa. Esta ONG lleva en la zona desde 1994 y, según aseguró ayer un portavoz, no se plantea irse.