"Fue nuestro partido más parejo"

Pellegrini es imperturbable. Gane o pierda. Goleador o goleado. El entrenador chileno siempre sale a escena con ese gesto nostálgico, como de poeta atribulado. Ayer jubiló a Raúl y recibió una pedrada en la cara. Era para alterarse. Pero él, apenas se frotó la mejilla. Qué más da. Su equipo ganó en el Calderón y, a pasear del aprieto de la segunda parte, siguió evolucionando. "Hicimos un muy buen primer tiempo", comentó, tras el partido. "Metimos dos goles, y tuvimos dos oportunidades claras. Controlamos el partido hasta la expulsión de Sergio. Eso nos complicó el partido. Luego nos refugiamos en el marcador y sufrimos porque el Atlético tiene grandes jugadores. Con un 3-2, este Atlético, volcado con Agüero, Maxi, Forlán... Pueden convertir en cualquier momento. Pero estos minutos difíciles no reflejan para nada lo que fue el partido".

"Nuestra virtud", continuó el técnico, "fue salir a por el partido. Hicimos una buena presión sobre la zona de creación de ellos. Esto les impidió hacer pases controlados a zonas peligrosas . Forlán apenas pudo recibir balones". Pellegrini se congratuló de que sus jugadores comenzaran a interpretar los conceptos que intenta transmitirles desde el verano. Ayer, cuando le preguntaron por la suplencia de Raúl y el efecto benéfico que ha tenido en la táctica del Madrid, el chileno retrucó a gran velocidad: "El equipo no se ha encontrado ahora. Ahora se ha encontrado toda la plantilla. Los 23 jugadores". Fue la declaración diplomática. En el aire flotó otra cosa.

"El equipo está asimilando una nueva mecánica de juego", explicó el técnico. "Contra el Atlético hicimos el partido más parejo que hemos hecho esta temporada. Hasta la expulsión no tuvimos problemas. Como en Milán, más o menos. Estamos avanzando". Pellegrini descartó que se trate de un nuevo esquema, o de un tema de alineación: "Consiste en tener coherencia y convicción. Demostrar seguridad defensiva sin tener dos bandas juntas. Ahora estamos teniendo fluidez, presionando más. Para mí, jugar con dos líneas de cuatro, con dos bandas fijos, no es la mejor idea. Mi propósito era intentar algo distinto".

"Hemos tenido algunos despistes que se no pueden volver a repetir", reconoció Casillas. "Creíamos que podían remontar, pero aguantamos", resopló Higuaín.