Una innovadora escena andaluza recala en el Teatro Bellas Artes

Cuando el productor Jesús Cimarro se hizo con la dirección del Teatro Bellas Artes, afirmó que abriría las puertas de este espacio a espectáculos de diferentes comunidades autónomas. Este año ofrece el ciclo Andalucía a escena, con cinco espectáculos muy diferentes entre sí de creadores innovadores. El Centro Andaluz de Teatro aporta una producción propia, El rey de Algeciras (del 21 al 25 de octubre), una obra radicalmente comprometida con un lugar transfronterizo, de Juan Alberto Salvatierra y bajo la dirección de Julio Fraga, quien deja claro que el montaje da voz a los 21.000 muertos que han intentado cruzar el Estrecho "y lo hace con mucho humor, mucha reflexión y mucha crítica". Además, ofrece una coproducción de este centro con Atalaya Teatro: Ariadna (del 11 al 15 de noviembre), que cierra la trilogía sobre mitos griegos de esta compañía, que el año pasado recibió el Premio Nacional de Teatro y que ahora habla de la rebeldía e insumisión de una mujer que da toda una lección de ética.

Es-puto Cabaret (del 28 de octubre al 1 de noviembre) es un espectáculo divertido, corrosivo y burlón de Espejo Negro, un grupo que defiende con uñas y dientes, desde hace dos décadas, un teatro de marionetas para adultos de gran calidad.

Una original propuesta en torno al flamenco, premiada en diferentes ámbitos, llega de la mano de Marco Vargas y Chloé Brûlé, con Timetable o el tiempo inevitable (4 y 5 de noviembre), un espectáculo puro, flamenco 100%, al tiempo que atrevido e innovador. La danza estará con The other side (7 y 8 de noviembre), de la compañía de Fernando Hurtado, que ha dado un gran impulso al género contemporáneo.