Bruselas advierte del "alto riesgo" para las finanzas públicas en España

España deberá acometer un importante ajuste para asegurar la sostenibilidad de sus cuentas públicas a largo plazo, considerada de "alto riesgo" por Bruselas. El deterioro de las cuentas públicas provocado por la crisis económica y el serio problema del envejecimiento suponen un serio desafío para España. El análisis sobre la sostenibilidad de las cuentas públicas de los miembros de la UE sitúa a España en el grupo de países con una situación más crítica a largo plazo.

El estudio de Bruselas señala que el indicador de sostenibilidad S2, que mide el impacto de la deuda y los gastos del sistema de protección, se sitúa en el 11,8% del PIB, muy por encima de la media europea del 6,5%. El indicador es un equivalente del esfuerzo que tendría que hacer un país para reconducir su deuda y afrontar su envejecimiento.

Se trata de uno de los países con peor pronóstico si no se toman medidas

El Círculo de Empresarios sugiere reducir el número de funcionarios

El deterioro de España queda patente si se compara con el informe de 2006, en el que el S2 era sólo 3,2% del PIB. La diferencia de 8,6 puntos porcentuales deriva de un empeoramiento de la situación presupuestaria (8,9 puntos porcentuales) y una mejora del coste del envejecimiento, que ha descendido 0,5 puntos.

Las previsiones del informe actual toman como objetivo a largo plazo el año 2060, mientras que en el realizado en 2006 se referían a 2050. Ambos estudios proyectan la situación en que se encontrarían las finanzas públicas en los próximos 40 o 50 años si no se introdujeran reformas. En el caso de España, la deuda pública, que este año se situará en 50,8% del PIB, alcanzaría un nivel insostenible del 528% en 2050 y del 766% en 2060.

El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, señaló: "Precisamos continuar dando soporte a la recuperación pero, en un contexto de severo deterioro de las finanzas públicas, las medidas para aumentar la confianza y apoyar la demanda sólo pueden tener éxito si son percibidas por los mercados y la opinión pública como temporales y consistentes con la sostenibilidad a largo plazo".

En el caso de España, la Comisión considera que el ajuste "debería tener lugar por la vía del aumento de los ingresos y disminución de los gastos". Además sugiere que "el sistema de protección social (en particular las pensiones públicas y el sistema sanitario) debería ser reformado para desacelerar el incremento previsto del gasto relacionado con la edad".

España se encuentra en el grupo de países que registra unas proyecciones de más riesgo, en el que están también Irlanda, Grecia, Letonia y Reino Unido. "El objetivo del informe no es provocar la alarma", señala una fuente comunitaria, "sino prevenir a los países de sus proyecciones a largo plazo para que puedan adoptar medidas que, si son a tiempo, pueden ser suaves y menos dolorosas". En relación con 2006, dos países, Portugal y Rumania, han mejorado claramente.

Las críticas al proyecto de Presupuestos del Gobierno español también arrecian del lado empresarial. "No vamos a acertar ni en los ingresos ni en los gastos", afirmó ayer el presidente del Círculo de Empresarios, Claudio Boada, quien tildó de "contraproducente" la subida de impuestos que pondrá en marcha el Ejecutivo en 2010 para recuperar ingresos, según informa Alejandro Bolaños. "El esfuerzo de consolidación fiscal más eficaz es el que se hace en el gasto corriente", sentenció el vicepresidente del Círculo de Empresarios, Fernando Eguidazu.

Eguidazu puso el punto de mira en los funcionarios - "Hay ministerios y organismos públicos que se pueden suprimir", sostuvo-, y, sobre todo, en las comunidades autónomas. En un tono menos afilado, la CEOE sostuvo en un comunicado que "los Presupuestos no encaminan las finanzas públicas a una senda de sostenibilidad presupuestaria".