La oposición reprocha a Griñán las 'cesiones' del Gobierno a Cataluña

Minutos antes de comenzar el pleno del Parlamento, alrededor de José Antonio Griñán y Carmen Martínez Aguayo se congregó un remolino de socialistas pródigo en felicitaciones por el resultado que ha obtenido Andalucía en el alumbramiento del nuevo sistema de financiación autonómico. Presidente de la Junta y consejera de Economía relataban las horas de vértigo y las intensas conversaciones con gesto de calma. Ya en la tribuna, Martínez Aguayo, lo reflejó en la primera frase: "Vengo con la satisfacción del deber cumplido". Sin embargo, cuando le tocó el turno a la oposición, el contrapunto fue diametralmente opuesto: Andalucía ha perdido, ha ganado Cataluña y sus tesis soberanistas; el papel de Griñán ha sido el de un "copiloto en el festival de insolidaridad".

Martínez Aguayo: "Nosotros no necesitamos gritar y vociferar"

El debate, convocado exclusivamente para explicar el acuerdo de financiación, fue una continuación de las declaraciones de la víspera, cuando se conocieron las cifras. Nadie convenció a nadie. La Junta se esforzó por resaltar la mejora "clara" del sistema y sus muchos beneficios, mientras PP e Izquierda Unida dispararon reiteradas ráfagas de frases indignadas contra un acuerdo sumiso y decepcionante que, sobre todo, según ellos, supone un enorme oprobio a Andalucía si se compara con Cataluña.

Para sostener su denuncia, los portavoces de ambos partidos (el propio Javier Arenas en el segundo turno) se agarraron a la efectista puesta en escena de las negociaciones del tripartito catalán y, especialmente, Esquerra Republicana, con el Gobierno y José Luis Rodríguez Zapatero en persona, que han eclipsado los contactos y presiones del resto de las autonomías. "Ha sido una negociación bilateral", insistió Pedro Vaquero (IU), "huele a pan tumaca, a poder catalán, que ha conseguido lo que no pudo en la transición, una especie de cupo como lo tienen País Vasco y Navarra con sus derechos forales". "No ha sido un proceso multilateral, todo el mundo lo ha visto, no se pueda ocultar", añadió.

Aunque en una primera ocasión habló Antonio Sanz, el secretario general del PP, en la réplica salió Arenas, que vino a decir lo mismo, pero con un lenguaje menos estridente: "El PSOE está más preocupado en preservar la estabilidad del sillón del presidente del Gobierno, pues los votos de ERC son básicos, que Andalucía salga bien en el modelo de financiación". También lanzó una puya a Martínez Aguayo: "Es la única en España que piensa que este modelo responde a su propuesta, pues todo el mundo cree que responde al tripartito de Cataluña".

La consejera se defendió del protagonismo de los catalanes y su imagen de vencedores: "Nosotros no necesitamos gritar y vociferar". Dijo que Andalucía mejora sustancialmente respecto al sistema vigente, con una financiación adicional (3.133 millones) que supone el mayor volumen de recursos que un "modelo de financiación ha otorgado jamás" a la comunidad. "Y no nos molesta que los demás también ganen, no somos sectarios, queremos la igualdad".