Cercana, bonita y barata

Desde la selva de Irati a los campos de la Ribera, desde el valle de Roncal hasta el nacimiento del Urederra o el parque Sendaviva, sin olvidar la menestra, los espárragos o el pacharán, y por supuesto los sanfermines, Navarra se ha convertido en el referente turístico para muchas familias de Euskadi. Ése es el dato que maneja la Dirección de Turismo navarra, cuyos estudios sitúan a los vascos como el primer grupo tanto en procedencia (16,5%) como en pernoctaciones (21,2%) entre sus visitantes. Y la tendencia se mantiene al alza, con una importante presencia sobre todo de vizcaínos (el 52% de los visitantes vascos) y guipuzcoanos (40%).

"Se trata, sobre todo, de un turismo familiar que busca las actividades relacionadas con la naturaleza y que está atenta a todas las novedades que se ofertan en ese ámbito", explica Carlos Arce, director general de Turismo navarro. Esta conclusión se apoya en el hecho de que sea la comunidad autónoma vasca el principal punto de origen de quienes reservan alojamientos de turismo rural, campamentos y albergues en la comunidad foral.

La comunidad foral quiere promocionar este año el cerco de Artajona

"En crisis se buscan destinos más próximos y se fragmentan las vacaciones"

Es evidente que esta querencia vasca por Navarra parte de las fuertes vinculaciones afectivas y culturales entre ambas autonomías y de su cercanía. "Yo añadiría la necesidad del contacto con paisajes vírgenes para practicar el senderismo o el montañismo por parte de ciudadanos que viven en zonas muy industrializadas y densamente pobladas", apunta Arce. "Se viene a Navarra a practicar senderismo o montañismo, incluso a visitar pueblos y tener contacto con sus gentes".

Arce tiene claro que en el actual auge de Navarra como destino turístico predilecto entre los vascos tiene una intervención importante la crisis. "Se buscan destinos más próximos, no cabe duda, pero también ha cambiado la forma de vivir las vacaciones, fraccionándolas a lo largo del año". Y, además, está la información. "No cabe duda de que hay un interés en los medios de comunicación de Euskadi por las noticias de Navarra", añade Arce, quien cita el ejemplo de la restauración de la catedral de Tudela, que ha recibido un considerable número de visitas vascas.

Entre los objetivos de la dirección navarra de Turismo para este año se encuentra la promoción del cerco de Artajona, en la Navarra media. Esta fortificación medieval acaba de ser restaurada, al igual que la iglesia de San Saturnino, que forma parte de la muralla y se levanta imponente en mitad del campo. Cerca, junto a Mendigorria, también se han abierto al público las ruinas de la ciudad romana de Andelos. La visita a este conjunto monumental será gratuita para quien acredite que ha pernoctado en la comunidad foral, dentro de la campaña anticrisis Navarra te recibe gratis, que recientemente ha sido presentada en Euskadi.