Pajín asegura que nadie cuestiona en el PSOE a Alarte

Ni Jorge Alarte, secretario general de los socialistas valencianos, ni Tomás Gómez, su homólogo en la federación madrileña, son cuestionados por el PSOE pese a las amplias victorias electorales conseguidas por el PP en estas dos comunidades en las pasadas elecciones europeas. Así lo reconoció ayer la secretaria de Organización federal, Leire Pajín, quien aseguró que ya existen sendos grupos de trabajo para sacar al PSPV del pozo electoral en el que se encuentra. La responsable federal reiteró que la responsabilidad por los resultados electorales en toda España es suya.

Desde hace meses el PSOE tiene sobre la mesa estudios postelectorales de la Comunidad Valenciana, que reconocen que el PP es identificado como el partido que mejor defiende los intereses valencianos y José Luis Rodríguez Zapatero hace gestión, pero no sabe o no pone suficiente atención en venderla entre los valencianos.

Y a partir de ahí ¿qué? Pues poco más. Pajín aseguró ayer que existe un grupo de estrategia que elaborará sendos planes de trabajo para Madrid y Comunidad Valenciana. Más allá de los planes o estrategias coordinadas por la dirección federal y la nacional, Alarte deberá ofrecer el próximo 27 de junio al comité nacional del PSPV-PSOE -máximo órgano entre congresos- un plan de trabajo con el que encarar las elecciones autonómicas y municipales de 2011. También deberá aclarar qué piensa hacer con el partido en Valencia.

Ayer, Alarte, que se reunió con el nuevo secretario general de la UGT-PV, Conrado Hernández, elegido hace mes y medio, se refirió a la patata caliente que es la ciudad de Valencia. "No hay fecha, no hay acuerdo y el próximo secretario general de Valencia será quien tenga más votos", subrayó.

El dirigente reiteró, por otro lado, que el partido estudia la presentación de una querella por la negativa del PP a elegir a Pajín senadora territorial. También recordó que el PSPV ha puesto en conocimiento de la fiscalía la denuncia de los 40 inmigrantes de Castellón que acudieron con sus familias al mitin de Rajoy en Valencia a cambio de conseguir un empleo.