La policía investiga al entorno de una chica muerta a tiros en L'Alfàs

La policía investiga el entorno más próximo de una joven de 17 años hallada muerta de dos disparos en la cabeza la mañana del sábado en su domicilio, un chalé en L'Alfàs del Pi. A la espera de que la autopsia revele pistas sobre el crimen, la investigación no ha aclarado aún el móvil, aunque "no se descarta ninguna hipótesis", afirman fuentes oficiales. Los agentes buscan ayer el arma homicida, una escopeta de caza, propiedad del padre de la chica.

El hecho de que los dos perros guardianes del chalé no dieran ninguna señal de alarma en el tiempo en el que se produjo el crimen, y que el supuesto autor tuviera conocimiento de la existencia de un arma de fuego en el interior de la casa, han llevado a los agentes de centrar las pesquisas en el entorno más íntimo de la muchacha, es decir, familia, amigos y novio. Los agentes han interrogado ya a este círculo de allegados, aunque sin efectuar arrestos.

El cadáver de la chica fue encontrado por su madre al filo de las 10 de la mañana. La joven yacía en la cama de su dormitorio con la cabeza destrozada. Un hermano de la chica la trasladó en su vehículo, aunque cuando ingresó los médicos comprobaron que estaba muerta. La adolescente había salido la noche anterior con sus amigos. Sus padres, propietarios de un bar, comprobaron que sobre las nueve de mañana, antes de partir a abrir el local, dormía en su habitación. Una hora más tarde la empleada de la limpieza de la casa alertó a la madre al ver forzada la puerta de la vivienda y ésta halló a la joven muerta. Los agentes comprobaron después que no se había producido ningún robo en el interior del chalé. La casa ha sido precintada.

El brutal crimen ha conmocionado a los vecinos. El Ayuntamiento ha puesto a disposición de la familia un equipo de psicólogos y le ha facilitado una vivienda alternativa.